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POLÉMICA TRAS LA VIOLENCIA EN GÉNOVA

Italia no investigará las cargas policiales de Génova pese a la protesta europea

El Reino Unido advierte de que considerará 'seriamente' las acusaciones de tortura de sus nacionales

Dos diputados alemanes de los Verdes, Hans-Christian Stroebele y Annelie Buntenbach, se encuentran desde anteayer en Génova, donde visitaron a los nueve heridos de su país hospitalizados. El Ministerio de Exteriores alemán señaló que 58 de sus nacionales están encarcelados en Génova. Todos ellos han contado a los diputados verdes que han sido víctimas de agresiones de las fuerzas de policía, en particular durante el asalto al centro del Foro Social de Génova, organización que engloba a un millar de asociaciones antimundialización. Stroebele ha solicitado una comisión de investigación internacional que aclare lo ocurrido.

En Bruselas, el grupo Los Verdes / Alianza Libre Europea en el Parlamento Europeo pidió ayer a la Comisión Parlamentaria de las Libertades Públicas y de Asuntos de Interior que 'examine los acontecimientos deplorables ocurridos en Génova, así como la actitud extrema de la policía italiana'. Y solicitaron a la presidenta de la Eurocámara, Nicole Fontaine, que en la próxima sesión plenaria del Parlamento se incluya una declaración con debate que pueda concluir con una resolución para que el Consejo de Ministros del la UE y la Comisión Europea den una explicación sobre los hechos. 'Nos parece indispensable que nuestro Parlamento tome una posición sobre el desarrollo de la cumbre del G-8, pues nuestra institución debe ser el garante de los derechos democráticos de los ciudadanos europeos y de la libertad de expresión'.

La negativa por parte del Gobierno del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, a poner en marcha una comisión de investigación avivó la polémica política en Italia. 'Si ya hay una moción de confianza por parte de El Olivo (coalición de izquierdas en la oposición) contra el Gobierno, la investigación para conocer los hechos quedó superada', expuso el presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara.

La oposición contraatacó duramente. El ex primer ministro Mássimo D'Alema, de los Demócratas de Izquierda (DS), replicó: 'Mientras la embajada alemana anuncia una investigación sobre el tratamiento recibido por los presos en las cárceles italianas durante la cumbre del G-8 a nosotros nos lo impide el Parlamento'. Y añadió que la 'connivencia con grupos violentos de la policía, protagonistas de escenas dignas del Chile de Pinochet, da ganas de llorar'.

D'Alema atacó también a los periódicos italianos porque han hablado muy poco de los hechos. 'Para informarme de lo que sucede en Italia he tenido que leer los diarios de España y Alemania', dijo el máximo exponente de la izquierda.

Por su parte, el portavoz parlamentario de su partido, Luciano Violante, aseguró que la postura de Berlusconi pone a Italia en una 'grave dificultad' frente a sus socios europeos.

Neofascistas infiltrados No se excluye que la oposición presente una propuesta de ley para crear una comisión de investigación, especialmente después que el senador Gabino Angius mostrara un documento -clasificado secreto- de la policía de Génova que habla de 'movimientos de extrema derecha dispuestos a actuar con violencia durante las manifestaciones pacíficas del G-8 para desacreditar a la izquierda'. El documento, publicado también por el diario Secolo XIX, habla de 25 a 30 militantes del movimiento neofascista Forza Nova infiltrados entre las filas de los pacifistas, o Tute Bianche (monos blancos), y de una lista de los anarquistas del Black Block (bloque negro) que llegó desde el extranjero para que la policía los detuviera junto a otros potenciales violentos.

El ministro de Exteriores, Renato Ruggiero, cosechó los aplausos de la mayoría gobernante: 'El G-8 fue una cumbre en favor de la vida, donde se perdonó la deuda externa a países endeudados por iniciativa de Italia y en la que creó un fondo para las enfermedades infecciosas, como el sida, para favorecer a las naciones pobres', dijo.

El vehículo es atacado por los manifestantes. El de la izquierda (con camiseta blanca) es Carlo Giuliani, que falleció. En el interior está Mario Placanica.
El vehículo es atacado por los manifestantes. El de la izquierda (con camiseta blanca) es Carlo Giuliani, que falleció. En el interior está Mario Placanica.REUTERS

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