El capitán del 'Privilege' niega ante Garzón que el buque transportase droga

Arnaldo Antonio Aranda, capitán del buque Privilege, apresado el pasado mes de agosto ante la sospecha de que pudiera transportar un alijo de cocaína, negó ayer ante el juez Baltasar Garzón su pertenencia a una organización de narcotráfico o que hubiera blanqueado dinero procedente del tráfico de drogas, delitos de los que se le acusa.

El capitán, de nacionalidad supuestamente panameña, manifestó tras su comparecencia que no es 'un narcotraficante, sino un navegante aquí abandonado a merced de todo el mundo', y explicó que se encuentra bajo tratamiento antidepresivo al haber tratado de quitarse la vida. Aranda ironizó, enseñando los medicamentos que guardaba en una cartera, que ésa es la única droga que traía y dijo que lleva 12 meses 'sin cobrar un dólar y con una familia que alimentar'.

Desde el apresamiento del Privilege, el capitán y el contramaestre, el mexicano Sergio Ruiz -únicos tripulantes que permanecen en España-, se encuentran alojados en la Casa del Mar de Las Palmas de Gran Canaria. Aranda está imputado y tiene que presentarse cada 15 días en el juzgado.

Según las autoridades italianas, Aranda cuenta con antecedentes por tráfico de drogas, algo que también niega el capitán. La defensa de Aranda ha pedido el sobreseimiento de la causa en lo que respecta a su cliente, único imputado, para que pueda regresar a su país. La Fiscalía Antidroga accede a esto último, pero se opone al archivo de la causa ante los indicios de que el barco pueda pertenecer a una organización de narcotráfico o de que sea fruto del blanqueo de dinero procedente del tráfico de droga.

El Privilege, un carguero de 120 metros de eslora con bandera de Santo Tomé y Príncipe, fue aprehendido el 31 de agosto de 2000 en aguas internacionales en una operación en la que intervinieron policías de varios países, y fue sometido durante dos semanas a un intenso registro que finalizó sin que se hallara rastro alguno de droga.

El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Gonzalo Robles, aseguró ayer en Altea (Alicante) que está 'absolutamente contrastada la relación entre los narcotraficantes y el barco' y señaló que este caso 'está bien cogido desde el punto de vista judicial'. El buque, que se encuentra atracado en el puerto de La Luz después de que se soldaran sus puertas y escotillas para evitar la entrada de personas no autorizadas, 'seguirá cogido durante bastante tiempo', añadió Robles.