El violoncelista bilbaíno Kepa De Diego recibe la beca Nicanor Zabaleta

De Diego fue seleccionado entre los ocho candidatos que solicitaron la beca 'por sus magníficas cualidades como violoncelista, su talento, su musicalidad y su proyección de futuro'. Pero, según reconoció ayer el diputado de Cultura, Luis Bandrés, el jurado -integrado por Gonçal Comellas, María de Macedo y Gloria Isabel Ramos- no lo tuvo fácil. 'El nivel de los candidatos ha sido muy alto señaló'. Pero De Diego, hijo, nieto y hermano de músicos, destacó un poco más. 'En cualquier familia', dijo ayer, 'te intentan poner en una dirección y yo acabé enamorándome de la mía y hasta hoy'.

El joven músico creció con la música en casa y con tan sólo siete años ingresó en el Conservatorio Superior de Música de Bilbao. Sobresalió en este centro, igual que en el de San Sebastián, donde cursó el grado superior de violoncelo con el profesor Roman Jablonski y obtuvo el Premio de Honor de fin de carrera.

De Diego ha explotado su virtuosismo a base de trabajo. Nada le ha salido gratis. Reconoce que ha tenido que renunciar a parte de su juventud pero sabe que es el precio que tiene que pagar. 'Nunca puedes ser brillante en una disciplina si haces 50 cosas a la vez', señaló. Él, que con 15 años fue galardonado con el Premio Especial del Jurado en el Concurso Nacional de Violoncelo, ha invertido su adolescencia en perfeccionar su técnica junto a profesores de prestigio internacional como R. Aldulescu, M. Strauss o R. Jablonsky y ha cultivado la música de cámara junto a R. Requejo o R. Vandra. Esta formación, que ha continuado en París, le ha servido para actuar como solista en agrupaciones como la Orquesta de Cámara de Bilbao o la Joven Orquesta de Euskadi. Ahora se trasladará al Conservatorio de Amsterdam para realizar su especialización. Tendrá a su disposición 2.000.000 de pesetas, uno menos que en la edición anterior de la Beca Nicanor Zabaleta. Bandrés dijoque la ayuda se ha recortado por los ajustes derivados de la prórroga del presupuesto foral.