Lo más invisible de Can Tunis

De un tiempo a esta parte, vamos encontrando en la prensa noticias sobre el estado (penoso) de las negociaciones para el desalojo de la barriada de Can Tunis. A quienes trabajamos allí, sin embargo, nos llama la atención el desinterés general por el futuro de tantos drogodependientes sin techo que pueblan la zona. Un desinterés que se hace lamentablemente extensivo al Plan de Acción sobre Drogas de Barcelona, que ha suspendido durante un número aún indeterminado de días el servicio del bus socio-sanitario, mientras se resuelve el cambio semestral de la subcontrata. Lo de menos es el grupito de profesionales que nos hemos quedado sin trabajo. Lo urgente es restituir de inmediato a los usuarios de drogas sin techo de Can Tunis el derecho a unos mínimos de asistencia sanitaria y social que, por otra parte, se les niegan en otras instituciones de la ciudad. Y junto con ello, por supuesto, que el Ayuntamiento empiece ya a mostrar algo más de visión y humanidad en sus estrategias, para que el persistente conflicto y la situación catastrófica de Can Tunis lleguen a tener una salida digna para todos quienes los padecen.