EE UU descarta que el detenido en Alicante sea un estrecho colaborador de Bin Laden
La policía española insiste en que Bensakhria es 'la mano derecha en Europa' del terrorista saudí
Fuentes del FBI han confirmado que existen vínculos entre Bensakhria y Bin Laden, aunque restan importancia a su papel en la cúpula militar de Al Qaida. El Departamento de Estado también había detectado 'una conexión' entre el argelino detenido en Alicante y el fugitivo saudí al que Estados Unidos acusa de los principales atentados antinorteamericanos de la última década, pero sin asignar demasiado valor a la detención. Bensakhria tampoco figura en la lista de las personas buscadas por EE UU por los ataques terroristas en 1998 contra sus embajadas en Kenia y Tanzania, supuestamente ordenados y llevados a cabo por la organización de Bin Laden.
El Ministerio del Interior y la policía española mostraron ayer su sorpresa y extrañeza por estos comentarios. Ambas instituciones insisten en que Bensakhria, de 34 años, es la mano derecha en Europa de Bin Laden. Fuentes de Interior subrayaron que el jefe de los magistrados antiterroristas de París, el magistrado Jean-Louis Bruguière, había solicitado el jueves a las autoridades españolas la detención de Bensakhria al tener datos solventes sobre su implicación en los planes del comando Meliani para atentar en varias ciudades francesas.
La policía aseguró ayer que había recibido el día anterior las felicitaciones del Departamento de Estado norteamericano por la detención y subrayaron que es la CIA y no el FBI la encargada de los asuntos de contraterrorismo en el exterior de Estados Unidos. [No obstante, tras el atentado contra sus embajadas en África occidental, el FBI lanzó la mayor investigación fuera de su país en la historia de la agencia, informa Ángeles Espinosa. Desde entonces, un millar de agentes del FBI y de la Fuerza Conjunta Antiterrorista han trabajado en esa zona del mundo en busca de pruebas]. Además, explicaron, Bensakhria era el nuevo responsable operativo para Europa de Bin Laden, ya que el anterior responsable de los comandos en el Viejo Continente fue capturado hace algo más de un mes.
Las citadas fuentes agregaron que, además de mantener estrechos contactos en los días previos a la captura con las policías y servicios de información de Francia y Alemania, también mantuvieron contactos con la CIA sobre Bensakhria, quien ayer fue enviado a la cárcel alicantina de Fontcalent por el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno. La prisión preventiva se prolongará hasta que se vea su causa de extradición hacia Francia, país en el que supuestamente pretendía perpetrar una cadena de atentados. En su comparecencia previa ante el juzgado de instrucción número 3 de Alicante, Bensakhria no se negó a ser extraditado, pero rechazó que haya participado en actos terroristas, según informaron fuentes de la defensa.
Mientras tanto, Estados Unidos profundiza sus medidas preventivas ante el riesgo de un eventual atentado contra sus intereses. Un contingente de marines recientemente llegado a Jordania para unas maniobras conjuntas con soldados de ese país abandonó apresuradamente ayer el puerto de Aqaba tras recibir la orden de suspender los ejercicios. Por su parte, las embajadas norteamericanas en Arabia Saudí y Qatar advirtieron a sus ciudadanos en los países del golfo Pérsico que estén alerta. 'Los estadounidenses deben moverse con discreción, variar los horarios y las rutas de sus viajes, y sospechar de cualquier correo o paquete recibido de fuentes desconocidas', asegura el mensaje que aparece en Internet y puede escucharse en el contestador de ambas legaciones.
El Pentágono puso el viernes en situación de máxima alerta a las tropas estadounidenses desplegadas en el golfo Pérsico ante una posible amenaza terrorista captada por los servicios de información. El Departamento de Estado también ha advertido a los ciudadanos de EE UU en el extranjero de que mantengan un mayor nivel de vigilancia ante eventuales atentados. Los servicios de espionaje de EE UU han interceptado una comunicación que contiene una posible amenaza contra sus intereses en el extranjero, especialmente en la zona del golfo Pérsico.
Aunque los expertos no pueden concretar el ámbito y la veracidad de la amenaza, el Pentágono y el Departamento de Estado tomaron rápidamente medidas de precaución. La amenaza se vincula tanto a una posible operación del grupo de Bin Laden como a eventuales represalias por el procesamiento el jueves de 13 ciudadanos saudíes y uno libanés a los que un tribunal del Estado de Virginia acusa de un atentado antinorteamericano cometido en 1996 en Arabia Saudí.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.