Descalabro
La Bolsa española sufrió ayer la segunda mayor caída de este año con el 3,68% en el índice Ibex 35. Madrid cedió el 3,22% y ambos indicadores entran en pérdidas en el año. Las razones de este descenso están en la posibilidad de una devaluación encubierta en Argentina, que perjudicaría los intereses de las grandes empresas españolas, precisamente las más afectadas en esta jornada, al proceder más del 30% de sus beneficios de aquella zona.
Telefónica perdió el 7,85%, la caída más abultada en más de 30 meses, al tiempo que el BSCH bajaba el 4,16%, el BBVA un 2,96%, Endesa el 2,52% y Repsol el 0,95%. La ponderación conjunta de estos valores en el Ibex 35 era del 69,93% al inicio de la sesión, lo que explica el temor que despertó entre los inversores su caída.
Si las grandes empresas españolas ven peligrar una buena parte de sus beneficios, la situación en la UE tampoco era ayer muy buena, ya que el IPC de mayo para la eurozona subió al 3,4% desde el 2,9%, mientras que se conocía el nuevo dictamen de dos institutos económicos alemanes que rebajaron sus estimaciones de crecimiento para Alemania hasta el 1,3% o el 1,7% desde el 2,1% de la revisión de abril. Los pronósticos de estos institutos eran de un crecimiento del 2,7% para Alemania en el otoño pasado.
La contratación en el Mercado Continuo fue de 365.403 millones de pesetas, 2.196,11 millones de euros, de los que Telefónica negoció el 44%. Entre los mercados europeos destacó el 1,58% que bajaba París y el 0,87% de Francfort poco antes de cerrar la sesión.
