El Ayuntamiento de Alcobendas apoya a las mujeres que 'secuestraron' un autocar

El Ayuntamiento de Alcobendas ha decidido apoyar a las 40 mujeres, empleadas de hogar, que el pasado martes secuestraron un autobús para denunciar el deficiente servicio que prestan los autocares interurbanos que les llevan cada día a las urbanizaciones de El Soto y La Moraleja en las que trabajan. Ayer, el delegado municipal de Transporte, Luis Cortijo, remitió una carta al gerente del Consorcio Regional de Transportes, José Ignacio Iturbe, del que depende el servicio de autobuses interurbanos, en el que le exige el cumplimiento del servicio en condiciones óptimas.

El martes, estas 40 mujeres secuestraron durante algo más de tres horas un autobús de la línea 5 para que las llevara hasta la comisaría de la Policía Nacional de Alcobendas-San Sebastián de los Reyes, y posteriormente, al Ayuntamiento de Alcobendas, para interponer una denuncia por el mal servicio de estos autocares.

Un portavoz del Ayuntamiento de Alcobendas explicó ayer que ha denunciado en reiteradas ocasiones que la empresa Interbus no venía prestando el servicio de manera correcta. Así, en los últimos 18 meses, la delegación de Transportes ha remitido hasta 15 reclamaciones a la adjudicataria por las deficiencias de su servicio.

'Hacemos nuestra la reivindicación de los ciudadanos que tienen que soportar esperas y retrasos en las paradas de esta línea', anunció Luis Cortijo. 'Por este motivo, hemos mandado una protesta enérgica al responsable del consorcio y esperamos que se adopten medidas de forma inmediata', añadió.

El Ayuntamiento, además, ha remitido una copia de la carta dirigida al gerente del Consorcio Regional de Transportes a todas y cada una de las mujeres que participaron en el secuestro y que, en su reclamación, denunciaban que Interbus incumplía las frecuencias de paso de los autobuses, establecidas en 15 minutos, lo cual, aseguran, está provocando hacinamiento en los vehículos e importantes retrasos. 'No podemos tolerar más, ni el Ayuntamiento ni los ciudadanos, que el servicio público de transporte se deteriore sin que los responsables de su funcionamiento tomen las medidas oportunas'.