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Un riego extra y la lluvia alivian la sequía del campo en la Vega Baja

Un riego extra concedido por la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) y la inesperada llegada de las lluvias en la tarde de ayer han aliviado la sequía del los cultivos de la Vega Baja, cuyos campos estaban prácticamente secos a causa de las altas temperaturas de los últimas semanas. Las más de 26.000 hectáreas de regadíos tradicionales del Bajo Segura, de las que la mitad corresponden a limoneros y naranjos, empezaron a recibir desde primera hora de ayer el último riego concedido por Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para paliar la citada escasez de agua que hacía temer a los agricultores graves pérdidas de cosechas e incluso que muriese parte del arbolado citrícola.

Desde la madrugada de ayer los primeros agricultores empezaron a recibir el agua en sus huertos de este riego que se prolongará durante una tanda de 25 días y cuya concesión causó gran satisfacción entre los beneficiarios. Hasta que CHS decidió la pasada semana otorgar este riego de unos 60 hectómetros cúbicos para los regadíos tradicionales de toda la Cuenca del Segura (las vegas Baja de Alicante y Media y Alta de Murcia), estos agricultores sólo podían esperar a un riego anteriormente previsto para el 15 de julio; entre los regantes se consideraba mayoritariamente demasiado tarde esperar a esa fecha para regar, y en tal sentido se pronunciaron en una reunión en Orihuela, cuyas conclusiones fueron trasladadas a confederación días antes del acuerdo positivo del organismo estatal de Cuenca.

De acuerdo con aquella decisión, el agua comenzó a llegar puntualmente a partir de las cero horas de ayer domingo y durante la madrugada ya eran muchos los agricultores que regaban en diversos puntos de la Vega Baja. 'El agua llegó puntual', confirmó ayer el juez del Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela, Antonio Barberá Seva, 'y todo está funcionando bien, el único problema es que durante el primer día se están regulando las acequias y algunos regantes se quejan de que no les entra suficiente agua, pero no es problema porque el lunes ya se completa la regulación y cada uno tendrá todo el agua que le corresponde'. Tras restar importancia a ese pequeño malestar de algunos -la mayoría podían regar bien-, Barberá Seva indicó que la calidad del agua recibida es correcta gracias a que se aporta desde infraestructuras del trasvase y no se arrastra tanta contaminación como antes, cuando todos los riegos tradicionales llegaban por el cauce del Segura arrastrando en cada riego hasta los huertos de la Vega Baja toda la suciedad acumulada en el cauce.

'Este riego ha llegado en el momento oportuno', señaló el representante de un Juzgado de Aguas que administra los intereses de 14.000 regantes, 'quizás un poco tarde [nadie quiere regar los cítricos a partir de mitad de junio]'.

Junto a este riego extra, los agricultores se encontraron en la tarde de ayer con otra grata sorpresa: la llegada de las lluvias. Las precipitaciones alcanzaron al conjunto de las comarcas alicantinas. En Elche, la tromba de agua causó un centenar de inundaciones. El centro de coordinación de Emergencias de la Generalitat alertó ayer tarde de la posibilidad de que se produjeran tormentas localmente muy fuertes en las tres provincias valencianas.

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