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Sanidad busca la 'legionella' en equipos domésticos de refrigeración

Los equipos que se encuentran trabajando en el rastreo de la fuente del último brote de legionella que afecta a Alcoy desde el 26 de mayo están centrando sus investigaciones en instalaciones pequeñas de refrigeración. Así lo señaló ayer a este diario Juan García de Lomas, catedrático de Microbiología de la Universidad de Valencia y portavoz de la comisión de expertos creada por la consejería de Sanidad para atajar la epidemia. La tesis que barajan los investigadores es que equipos de refrigeración domésticos, -de comercios, restaurantes o locales de ocio- que se han conectado durante la subida de temperatura de los últimos días podrían haber provocado los cinco casos de neumonía por legionella detectados desde este último brote. García de Lomas apuntó que no existe continuidad respecto a la fuente causante de los casos de los primeros brotes, ya que entonces, según sostiene, fueron las torres de refrigeración industriales la que propagaron la bacteria.

Ante las sospechas de que ahora sean equipos pequeños, los investigadores se encuentran realizando un rastreo minucioso barrio por barrio dirigido a localizar todas estas instalaciones. García de Lomas apuntó la posibilidad de que estos pequeños focos, en el caso de que sean los causantes de los nuevos casos, pudieran haber coexistido con las fuentes más potentes en anteriores brotes, correspondientes a las torres de refrigeración industriales.

Viaje a Alcoy

El consejero de Sanidad, Serafín Castellano, destacó que se están analizando todas las posibilidades y los posibles focos, y subrayó la profesionalidad y el trabajo que están desarrollando los epidemiólogos desplazados a Alcoy para estudiar la nueva embestida de la bacteria. Castellano se desplazará hoy a la ciudad para mantener una reunión para seguir la evolución de las investigaciones y mantener un contacto con los investigadores. El consejero de Sanidad coincidió con el diagnóstico de García de Lomas al destacar que los análisis quincenales practicados a la red de agua y los equipos industriales de refrigeración no han detectado la bacteria, por lo que dudó que la fuente se encuentre en alguno de estos emplazamientos.

Por otra parte, la anterior concejal de Sanidad en el ayuntamiento de Alcoy, la socialista María José Segura, señaló ayer que la aparición de los últimos casos de neumonía por legionella en la ciudad habían coincidido con el descenso en el nivel de cloración de la red de agua potable hasta 1,3 partes por millón (ppm). La concejal recordó que esta medida preventiva se fijó el pasado mes de noviembre, cuando la epidemia cobró mayor virulencia y se detectó la presencia de la bacteria en la red de agua. Entonces se fijo la medida de cloro en dos partes por millón. Ésta fue reducida a 1,7 ppm durante el invierno ante un receso de la enfermedad y en las últimas semanas se ha llegado hasta 1,3 ppm, informa Lucía Gadea.

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