La Junta busca el apoyo del PP frente a las trabas para alojar inmigrantes

El titular de Gobernación recalcó ayer que no impondrán ni plazo ni condiciones en la negociación que abrirá la próxima semana la Junta de Andalucía con el Partido Popular para tratar de cimentar un acuerdo sobre inmigración, que esté al margen de la batalla política. Alfonso Perales incluso aceptó el emplazamiento de la presidenta regional del PP, Teófila Martínez, sobre limitar el diálogo a las materias de competencia autonómica. 'Cae de su propio peso', ironizó el consejero antes de tender la mano al PP: 'Estamos dispuestos a limitarlo al ámbito autonómico y municipal'.

A pesar de que el diálogo carecerá de guión previo, la Junta confía en aprovechar las conversaciones para tratar de solucionar la falta de alojamientos de los inmigrantes, que constituye la principal traba para su integración social. El consejero de Gobernación se mostró ayer esperanzado en que el acuerdo con el PP permita vencer las reticencias de los alcaldes almerienses (tanto del PSOE como del PP) a ceder suelo para facilitar la construcción de alojamientos para inmigrantes que trabajan en sus municipios.

Oposición municipal

La oposición de los ayuntamientos se ha convertido el principal obstáculo para desarrollar el decreto de alojamientos aprobado por el Gobierno andaluz, que contemplaba subvenciones para edificaciones destinadas a los temporeros, nacionales o extranjeros. 'Como la sensatez se tiene que imponer, habrá un acuerdo entre el PP, el Gobierno y los ayuntamientos para resolver este problema', dijo. 'Una sociedad del siglo XXI no puede soportar que haya personas que vivan permanentemente en condiciones infrahumanas', agregó.

Gobernación también aspira a lograr la implicación y el beneplácito de la dirección regional del PP al plan integral de la inmigración, que ayer recibió el visto bueno de la comisión interdepartamental de políticas migratorias, un órgano de coordinación en el que están representadas 10 consejerías y los Institutos de la Juventud y de la Mujer. El documento, que tendrá una dotación presupuestaria superior a los 15.000 millones de pesetas, será aprobado por el Consejo de Gobierno a finales de junio, según Perales.

Alfonso Perales elogió ayer el plan como 'modélico', aunque condicionó su éxito a los resultados. 'La eficacia no está tanto en el documento, sino en que consiga la integración de las personas', señaló.

La comisión interdepartamental acordó ayer la creación de una oficina técnica, que se encargará de garantizar que se contemplen las partidas presupuestarias, el cumplimiento del calendario fijado para ejecutar algunas medidas y garantizar la aplicación de las mismas. Aunque el documento incluye actuaciones que están en marcha como la escolarización o la atención sanitaria, se incorporan también medidas nuevas. Perales calcula que el documento alcanzará su 'velocidad de crucero' en enero de 2002.

El plan, que también será debatido por el Foro Andaluz de la Inmigración, la Federación Anddaluza de Municipios y Provincias y el Parlamento, tendrá vigencia hasta 2004, aunque el consejero puntualizó que será 'abierto' y 'flexible' para incorporar o retirar actuaciones dependiendo de su eficacia. El documento, que contempla 175 medidas de actuación, nace con el doble objetivo de favorecer la integración de los inmigrantes que residen en Andalucía, que apenas representan el 1,2% de la población, y de sensibilizar a la sociedad de acogida. 'No es suficiente la caridad, hay que buscar la solidaridad que se acompañe de la reciprocidad', dijo Perales.