La Comunidad pide a Fomento compensaciones por ampliar el aeropuerto

El estudio de impacto medioambiental que Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) elaboró hace un mes reconocía que la ampliación de Barajas dañaría 'gravemente' la flora y la fauna de una zona declarada, por la Unión Europea, lugar de interés comunitario. Esta zona se extiende unos cien metros a cada lado del río Jarama. Además, AENA organismo público dependiente del Ministerio de Fomento, proponía 'desecar' 1.700 metros de río para poder construir una de las dos nuevas pistas sobre su cauce. Desde que AENA presentó el estudio, la oposición política, los 24 ayuntamientos afectados, las asociaciones de vecinos y los ecologistas han presentado más de 2.000 alegaciones porque creen que los impactos negativos que producirán las obras serán mucho mayores que los beneficios de la ampliación de Barajas.

Ahora le ha tocado el turno al Gobierno que preside Alberto Ruiz-Gallardón y, aunque acepta que se desvíe 1.700 metros el cauce del río Jarama, a cambio pide compensaciones. La principal de las alegaciones que presentó ayer el consejero de Medio Ambiente, Pedro Calvo, es que Fomento se encargue de recuperar todo el río. 'Se trata de que se compense la alteración sufrida en un determinado lugar con mejoras en otros puntos del entorno', explicó Calvo.

Aguas contaminadas

De esta forma, el Gobierno regional pretende que Fomento costee la recuperación de la totalidad de las contaminadas aguas del Jarama, no sólo de la zona que se verá afectada por las obras de la ampliación del aeropuerto. En el proyecto del Plan Hidrológico Nacional que el Gobierno central remitió al Congreso de los Diputados en febrero pasado, se reconocía que las aguas de este río 'no son aptas para ningún uso', salvo para el riego, 'y aún así, con ciertas precauciones'.

Para recuperar el Jarama, Medio Ambiente exige a AENA que amplíe 100 metros cada una de las orillas del río desde Talamanca del Jarama hasta su desembocadura en el Tajo. Esta medida podría extenderse a las orillas del Henares, que también se vería afectado por las obras, desde su entrada en la región hasta su desembocadura en el Jarama. Otras compensaciones que pide el Gobierno regional son la recuperación, adquisición y construcción de zonas cercanas al recorrido del río, como la recuperación de márgenes de los arroyos de San Román y de la Galga (afluentes del Jarama), y la repoblación de especies en la finca Soto de la Heredad.

Además de exigir compensaciones, la Comunidad tampoco acepta las previsiones que AENA ha elaborado sobre el impacto que tendrán los trabajos de las propias obras sobre los municipios cercanos, como emisión de ruidos y polvo. En general, el Gobierno regional considera 'insuficiente' el estudio medioambiental elaborado por AENA. 'Queremos que se forme una comisión de control, en la que figure la Comunidad, que vigile la contaminación ambiental y acústica', afirmó Calvo. Además, Medio Ambiente exige la puesta en marcha de una red de control de calidad del aire y que el aislamiento acústico de las viviendas se haga extensivo a todas las zonas afectadas. 'Hay que delimitar un mapa del ruido con todas las poblaciones que van a sufrir este problema e intentar que el impacto sea lo menos negativo posible', subrayó el consejero.

Las obras de ampliación del aeropuerto tienen un presupuesto de unos 300.000 millones. Se prevé que terminen para 2015 con la apertura de un nuevo aeropuerto, previsiblemente en Campo Real.

Con todas las alegaciones, el Ministerio de Medio Ambiente redactará la declaración de impacto ambiental en la que impondrá al de Fomento las medidas correctoras que considere oportunas. Sólo entonces, AENA podrá comenzar los trabajos de ampliación.