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LA SITUACIÓN EN EL PAÍS VASCO

Aznar sólo acepta una mesa por la paz que excluya la autodeterminación

PNV-EA destacan que hubo una 'soberana respuesta' a PP-PSOE e invitan a un desarme verbal

En una entrevista publicada ayer por Il Corriere della Sera, el jefe del Ejecutivo español expresó su disposición a restablecer unas relaciones institucionales normales con el Gobierno vasco, pero a la vez advirtió que no permitirá 'que Arzalluz haga lo que quiere', en alusión a la sugerencia de éste para formar una mesa que busque el cese de la violencia en Euskadi al estilo de lo que se ha hecho en Irlanda. En una entrevista en RNE, Aznar explicó que la vía irlandesa no tiene nada que ver con el País Vasco, tanto por la diferente raíz histórica de uno y otro conflicto como por la ínfima autonomía de Irlanda del Norte en comparación con la de Euskadi. Y a continuación afirmó que 'unos buscan la rendición inmediata y otros buscan una rendición en el tiempo. Creo que la vía irlandesa', abundó, 'es el intento de algunos por hacer lo siguiente: aquí hay quien quiere llegar a conseguir la autodeterminación, es decir la separación, la segregación, y por eso mata o extorsiona; y hay quien lo quiere conseguir a plazos'.

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Al transmitir su disposición a abrir un nuevo periodo de normalidad en las relaciones del Gobierno de la nación con el Ejecutivo vasco, Aznar aclaró que lo que él entiende por normal es hablar y dialogar en la instituciones, no el 'forzar las cosas para que las instituciones desaparezcan'. Tras indicar que él va a observar cuál es el comportamiento del Gobierno vasco a ese respecto para 'tomar nota', apuntó los obstáculos con que a su juicio se va a encontrar el lehendakari Juan José Ibarretxe para cumplir su promesa electoral de no apoyarse en los votos que tiene EH en el nuevo Parlamento vasco. 'El PNV ha concurrido a las elecciones con un programa en el que figuraba la defensa del soberanismo. Ha recibido, aproximadamente, unos 80.000 votos de HB, y tiene un compromiso de no acordar nada con los partidos violentos. Voy a ver cómo se administra eso'.

Aznar recordó que más del 40% de la sociedad vasca votó a partidos constitucionalistas el pasado domingo, y destacó que una de las principales consecuencias de las elecciones es que 'hay una alternativa bien trazada, bien diseñada, y un deber claro de coherencia respecto al mandato que esos partidos [PP y PSOE] han recibido de sus electores para seguir planteando esa alternativa de cara al futuro'.

Por su parte, el portavoz de la Ejecutiva del PNV, Joseba Egibar, exhortó al 'desarme verbal' entre los partidos y al inicio de 'una nueva etapa' de diálogo y de respeto hacia los proyectos de todos las fuerzas parlamentarias, en línea con las manifestaciones más reciente del ganador de las elecciones, el lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe. Egibar, que compareció junto al secretario general de Eusko Alkartasuna, Gorka Knörr, para analizar en nombre de la coalición nacionalista ganadora los resultados de los recientes comicios, indicó que las elecciones han constituido también 'una soberana respuesta' de la sociedad vasca al Pacto Antiterrorista y por las Libertades firmado el pasado diciembre por el PP y el PSOE. Egibar añadió que los dirigentes de esos partidos deberán decidir cómo administran aquel acuerdo y si éste aún tiene 'algún sentido y alguna virtualidad', informa Isabel C. Martínez.

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