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EU insta a dimitir al concejal de Valencia que impugna las cuentas

Ibáñez decide su futuro hoy tras revisar las finanzas de la agrupación

El conflicto en el seno de la agrupación de EU en Valencia surgió el pasado mes de noviembre cuando dos militantes adscritos a la denominada plataforma crítica hacia los actuales responsables de la dirección federal y nacional de la coalición de izquierdas expresaron dudas sobre las aportaciones a las finanzas del partido por parte de ciertos asesores.

Los órganos oficiales de EU negaron las irregularidades y recordaron que las cuentas habían sido aprobadas en las correspondientes asambleas del partido.

Fuentes de la dirección de EU comentan que los primeros problemas se plantearon días antes de la última asamblea municipal y de la posterior asamblea nacional que eligieron a la actual dirección.

Ibáñez se sumó a las exigencias de los dos militantes críticos el pasado mes de enero, recurrió a los órganos internos del partido encargados de la resolución de conflictos ante las supuestas resistencias de la organización a entregar las cuentas y, debido a su condición de concejal en Valencia, elevó la disputa a un caso de relevancia pública.

La agrupación de Valencia sostiene que el pleito carece de sentido y alega que Ibáñez no agotó todas las vías previstas para acceder a las cuentas del partido. Las diferencias en la interpretación de la contabilidad no superan el millón de pesetas, según fuentes de EU, pero la notoriedad del caso ha sido interpretada por la agrupación como 'un claro chantaje' de parte de Ibáñez, cuya 'opinión subjetiva' provoca 'graves perjuicios para determinadas personas y para el conjunto de la organización'.

Los responsables de la agrupación de Valencia han accedido a entregar al concejal todos los documentos contables que requiere. Pero sugieren que, una vez revisados los libros, 'es imprescindible que cumpla su palabra y presente la dimisión de su cargo'.

Ibáñez, por su parte, invoca su ética política para mantener viva su reclamación y alega que es 'absurdo representar a una organización donde no se respetan los más elementales derechos democráticos'. El concejal asegura que dejará el cargo si comprueba que sus dudas carecían de sentido, pero se muestra dispuesto a batallar si detecta alguna irregularidad.

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