Una exposición difunde el eclecticismo fotográfico del francés Jean Dieuzaide

'Debo reconocer que la fotografía me eligió cuando yo quería ser piloto', afirma el fotógrafo en el catálogo de la exposición. 'No me arrepiento de nada. Sin embargo, se me hizo duro asumir mi condición de fotógrafo, sometido por una parte a la hegemonía parisiense y, por otra, a las burlas, la incomprensión y las miradas de indiferencia activa del mundo de las artes, la cultura, la política y otros estamentos'.

La trayectoria de Dieuzaide, compañero y amigo de Robert Doisneau, estuvo marcada en sus inicios por la liberación de Toulouse en 1944. Fue uno de los pocos fotógrafos que salió entonces a la calle y obtuvo numerosos documentos gráficos que después le demandó la presidencia francesa. De hecho, realizó uno de los primeros retratos publicados en Francia del general De Gaulle. Todavía entonces, por presión familiar, utilizaba el seudónimo Yan al firmar sus obras. La fotografía del general francés y otros de sus retratos más conocidos están expuestas en la primera de las tres salas en las que está dividida la muestra. Junto a ellas figura el Dieuzaide intimista, el místico, el que se adentra en las iglesias románicas y reflexiona en sus fotografías sobre la crucifixión de Cristo.

Pero éste es sólo uno de los aspectos sobre los que ha trabajado el fotógrafo a lo largo de su dilatada trayectoria. Su hijo lo explica con claridad en un vídeo que se proyecta en la sala: 'Lo que diferencia a mi padre de otros fotógrafos de su generación es que ha abarcado todos los campos de la fotografía'. Fue uno de los primeros en dar importancia a los formatos grandes, y además experimentó variantes de esas fotografías, a través de la escultura, el tapiz o la serigrafía, como puede verse en San Telmo.

También lo probó todo en cuento a temáticas. El fotógrafo -que ha cosechado innumerables premios y tiene su propia sala de exposiciones- se ha empeñado en acercarse a las gentes humildes de países como Turquía, España o Portugal. No le asusta subirse sobre un funambulista, encima de la cuerda, para fotografiar la boda de su hija, cuando se trata de recorrer el mundo como un cazador de instantes para ensalzar la dignidad humana.

La retrospectiva forma parte del programa del Festival Biarritz Terre d'Images -que se celebrará entre el 5 y el 8 de mayo- y que muestra en esta ciudad las fotografías que Dieuzaide realizó en Euskadi en los años cincuenta.