Droga y educación en Mislata
De un tiempo a esta parte, se ha intensificado el trapicheo y consumo de drogas en los alrededores de los colegios públicos Amadeo Tortajada y Jaime I de Mislata, así como de la piscina cubierta municipal. Es lamentable observar el desfile de personas que acuden a por su dosis y a consumirla cada vez más cerca de dichos centros. Junto a este deterioro social hay otro medioambiental: los alrededores de estos centros educativos son auténticos basureros. Tenemos enfrente una fábrica de papel que produce un ruido sordo y constante. Entre la fábrica y los colegios hay un extenso terreno que es una pena.
El Ayuntamiento tiene que tomar cartas en este asunto. Este deterioro ambiental, junto con el escaso control, contribuye mucho al consumo de drogas y al pasotismo en el cuidado del entorno. Si queremos realizar una labor preventiva en el mundo de la droga y del medio ambiente actuemos desde donde podemos hacerlo: el Ayuntamiento y la Generalitat. Las escuelas y la piscina de Mislata se merecen unos alrededores más sanos y mejor ambientados.
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