Universidad: la selección del profesorado

La selección del profesorado universitario sigue siendo tema de polémica. Unos abogan por elegir personas con amplio currículo profesional, garante de competencia, y experiencia en otras universidades, preferentemente de países punteros (Gabriel Tortella, Todo queda en casa, EL PAÍS del 8 de abril de 2001), mientras que otros, más cercanos al sistema, ven con buenos ojos apoyar a candidatos locales, aunque parecen también estar abiertos a otras opciones (Saturnino de la Plaza Pérez, La selección de profesores, EL PAÍS del 8 de abril de 2001).

Imaginen que de verdad los objetivos de la Universidad son importantes: investigación, con el objeto de crear conocimientos y tecnologías nuevos que mejoren la competitividad de nuestra sociedad en su conjunto, y transmisión eficaz del conocimiento a nuestra juventud, con los niveles de excelencia más altos posibles y en todo caso suficientes como para situar a los futuros licenciados en situación ventajosa (o al menos de igualdad) en relación con licenciados de las buenas universidades de otros países. Imaginen por fin que la estabilidad y progresión profesional de las personas de cada universidad con responsabilidad para intervenir en la selección de nuevos profesores estuviera también vinculada a lo acertado en sus decisiones. No les quepa duda de que, en este esquema de funcionamiento, la historia profesional de los posibles candidatos cobraría todo el peso que tiene hace ya tiempo en esas universidades modernas de otros países que tan frecuentemente usamos como referencia. Y quizás nuestros sistemas tradicionales de selección de profesorado irían perdiéndose en el pasado.-