Dudas sobre el paro

Una vez superado en febrero el periodo estacional que se inicia en agosto o septiembre, en el que el paro registrado en las oficinas del INEM suele aumentar, en el mes de marzo último éste volvió a reducirse en 20.500 personas. Es de prever que al menos hasta el mes de agosto próximo se produzcan sucesivas reducciones de este colectivo y, si no es así, será porque la actividad económica se debilite más de lo previsto. Esta pauta estacional hace que las variaciones mensuales del paro no sean significativas para captar su verdadera tendencia. Para ello es necesario desestacionalizar las cifras, lo que puede hacerse de forma rápida, barata y fiable con cualquiera de las técnicas estadísticas disponibles. Para que la opinión pública pudiera entender mejor la información que proporcionan las estadísticas coyunturales, sería muy útil que los propios responsables de su publicación las ofrecieran también en estos términos, tal como se hace en el país de las estadísticas y del pragmatismo por excelencia, Estados Unidos.

La cifra media de parados en el primer trimestre, desestacionalizada, supera ligeramente a la del cuarto del pasado año.

Utilizando las cifras desestacionalizadas por el Ministerio de Economía, el número de parados en marzo también disminuyó, pero sólo en 6.400 personas. Otra forma de valorar las cifras originales ante la presencia de estacionalidad es compararlas con el mismo periodo del año anterior, afectado teóricamente por la misma o muy similar estacionalidad. En este caso, la comparación tampoco resulta positiva, pues en marzo del año 2000 la reducción fue de 31.300 personas. Esta pauta de reducciones inferiores a las del año anterior viene observándose ya desde mediados de 1999, lo que hace que la tasa de variación interanual, aunque sigue siendo negativa, se acerca rápidamente a cero (gráfico superior derecho). La cifra media de parados en el primer trimestre de este año, desestacionalizada, supera ya ligeramente a la del cuarto del pasado año (gráfico izquierdo). Si observamos el desglose por sectores, nos encontramos con que las cifras de parados registrados en marzo en la construcción y los servicios superan a las del mismo mes del año anterior, lo que no se producía desde 1994.

Todo esto parece coherente con la percepción de pérdida de ritmo de la economía española, pero no encaja bien con otras estadísticas del mercado de trabajo, que nos muestran un panorama menos deteriorado. Esta misma semana, el Ministerio de Trabajo ha publicado también la cifra de afiliados a la Seguridad Social de marzo, con un crecimiento notablemente superior al del mismo mes del año anterior. La tasa media de crecimiento interanual en el primer trimestre (4,6%) se mantiene al mismo nivel del trimestre precedente, lo que indicaría que el ritmo de creación de empleo no se está viendo apenas afectado. La evolución del paro registrado y del paro de la EPA registra tendencias contrarias desde mediados del pasado año.

Tendremos que esperar a la EPA del primer trimestre para ver cuál de las dos estadísticas refleja mejor la coyuntura del mercado laboral. Es posible que los registros del INEM no reflejen, una vez más, la verdadera evolución del paro. Otros indicadores de producción y demanda parecen señalar que el comportamiento de la economía española en el primer trimestre está siendo algo mejor de lo previsto.

Ángel Laborda es director de coyuntura de la Fundación de las Cajas de Ahorros Confederadas para la Investigación Económica y Social (FUNCAS).