La Guardia Civil ha capturado a 3.000 inmigrantes en patera en lo que va de año

A estas alturas de 2001, la cifra de detenidos cuando intentaban entrar en el país a bordo de pateras supera ligeramente la del año anterior, a tenor de los primeros datos estimativos facilitados por distintas comandancias de la Guardia Civil. El 19 de marzo superaban los 2.600, frente a los 2.206 apresados en los tres primeros meses de 2000.

Las playas de Algeciras son las preferidas para el atraque de los visitantes clandestinos, que han cambiado sus pateras de madera por lanchas semirrígidas del tipo zodiac, mucho más rápidas y seguras. En ellas suelen transportar cantidades de droga cada vez mayores. En la embarcación detenida ayer en Tarifa los agentes hallaron dos fardos con 60 kilos de hachís. Desde el 1 de enero hasta el jueves, la Guardia Civil de esta localidad detuvo a 2.100 personas e intervino 15 toneladas de droga.

Mayoría de marroquíes

A estos inmigrantes hay que añadir los interceptados en el resto de la costa andaluza y en Canarias. El lunes los agentes del archipiélago dieron el alto a 14 individuos de Sierra Leona y Nigeria que acababan de desembarcar en la localidad de Tuineje, al sur de Fuerteventura. Con ellos, la cifra de extranjeros detenidos en la isla se elevó a 363.

El 80% de los detenidos es de origen marroquí. El dato es significativo, porque los ciudadanos de ese país son los mejor informados de toda África sobre los cambios legislativos registrados en España. Las cifras provisionales demuestran que, a pesar de los inconvenientes que plantea la reforma de la Ley de Extranjería -que el Gobierno defendió como un imprescindible elemento disuasorio para los inmigrantes- España sigue emitiendo una llamada irresistible.