Bronca entre policías de paisano de Córdoba y el público que asistía a una sesión plenaria

Ciudadanos de un centro de mayores de Córdoba y policías locales fuera de servicio se enfrentaron ayer en el transcurso del pleno ordinario del Ayuntamiento cordobés cuando los agentes protestaban por los horarios que se les han impuesto para desarrollar labores de vigilancia durante la Semana Santa. El desarrollo virulento habitual de las sesiones entre el gobierno y la oposición -y que ayer volvió a reproducirse- se ha trasladado a la parte que ocupa el público que asiste a las mismas.

Los dos plenos celebrados -el de presupuestos y el ordinario- estuvieron salpicados por las interrupciones, ya que esa zona destinada al público se llenó para trasladar a la corporación diversas protestas: la de los policías locales por los turnos de Semana Santa, la de los trabajadores de Servicios Sociales y la de los empleados de la empresa Pedraza Llamas que han recibido el anuncio de que serán despedidos.

Los agentes, vestidos de paisanos, portaban pancartas que exigían regularizar la situación de la plantilla. Una veintena de ellos se acercó hasta el lugar que separa a los políticos del público y allí permanecieron hasta que fueron reclamados por otros asistentes para que dejaran ver el pleno. El detonante de la discusión surgió cuando uno de los policías locales demandó la vuelta del portavoz municipal del PP, Rafael Merino, a la alcaldía. '¡Vuelve Merino!', dijo el agente, a lo que siguió una tímida protesta de otros asistentes. Mientras tanto, la alcaldesa, Rosa Aguilar, seguía la protesta sin intervenir.

Fue cuando parte del público reclamó a los agentes que se retiraran cuando comenzó la bronca. Una representación de un centro de mayores increpó a los agentes. '¿Dónde estáis cuando os llamamos?', preguntaron a los agentes. La tensión subió de tono cuando desde ambos bandos se cruzaron insultos y la disputa acabó cuando los agentes se retiraron del salón plenario.