Aldaia y Quart de Poblet exigen el cierre de la planta de basuras de Fervasa

Las alcaldesas de Aldaia y Quart de Poblet, Empar Navarro y Carmen Martínez, presentaron ayer un informe en el que desglosan las irregularidades que a su juicio se cometen en la planta de tratamiento de basuras de Hornillos, de la empresa pública Fervasa. Exigieron su cierre y anunciaron que tomarían medida legales si no se palían pronto las molestias que sufren por la instalación que comparten en sus municipios. Las alcaldesas califican de obsoleta a la planta, inaugurada en 1968 y que trata más de 400.000 tonelada anuales, 'cantidad que desborda las instalaciones'. Recordaron que el Plan Integral de Residuos del Consell preveía su sustitución por dos plantas y que tampoco se ha cumplido el plan de modernización de Hornillos al que se comprometió el Consell en 1998 con un coste de 2.500 millones de pesetas.

'El grado de deterioro de la planta es tal que a simple vista se observan impactos ambientales molestos, principalmente olores, filtraciones de lixiviados y deterioro de las propiedades colindantes', afirman los ayuntamientos, que han pedido a la Consejería de Medio Ambiente y a la Confederación Hidrográfica del Júcar informes sobre su contaminación.