CDC y Unió afrontan esta semana su futura federación
Organismos de decisión paritarios, listas conjuntas, voto de calidad para Jordi Pujol en la futura federación de partidos... Unió y Convergència se acercarán esta semana un poco más al altar que augura un final feliz y, por supuesto, en común. Eso es, al menos, lo que persigue el guión que desde hace unas semanas están escribiendo los negociadores de ambos partidos. Y todo bajo la mirada vigilante de Jordi Pujol y de Josep Antoni Duran Lleida. Hoy las ejecutivas de CDC y de UDC se reunirán para ultimar las bases del acuerdo que ha de llevar a la coalición a una federación de partidos a partir de abril, y que se someterá a la aprobación definitiva de sus respectivas militancias en sendos consejos nacionales que se celebrarán el próximo sábado.
Xavier Trias, por CDC, y Núria de Gispert, por UDC, son los responsables de estas negociaciones, que se fijaron como fecha máxima el pasado sábado, 24 de marzo, aunque ambas formaciones han decidido darse siete días más de margen para llevarlas a buen puerto. Lo que se someterá el próximo sábado a las bases será un programa de mínimos fruto de la escasa media docena de reuniones que ambas formaciones han mantenido. Las últimas filtraciones apuntan a que Jordi Pujol tendrá un voto de calidad que sería determinante en una ejecutiva paritaria. Además de un comité ejecutivo conjunto, la federación contaría con una comisión sectorial y otra de tipo territorial que se encargaría de confeccionar las listas municipales en todas las localidades en las que se presente la futura federación.
Mucho 'fleco'
Pero quedan muchos flecos y un precendente envenenado. Los flecos son quién será el cabeza de lista para la alcaldía de Barcelona, quién encabezará la candidatura de CiU en Madrid en las próximas legislativas y si finalmente Unió se queda o no con el Departamento de Cultura. El precedente envenenado es la declaración unilateral por Pujol de Artur Mas, secretario general de CDC, como su sucesor. Así que la dureza de los mimbres no augura un trabajo fácil.
Tanto desde Unió como desde Convergencia se muestra una buena predisposición para que los democristianos encabecen por primera vez una lista electoral municipal. No obstante, resulta sorprendente que Jordi Vilajoana, hombre del círculo de Mas, haya lanzado su candidatura para ese cargo de forma informal pero con todas las bendiciones del entorno del actual conseller en cap.
Desde Convergència no se descarta que Unió lidere la próxima lista electoral al Congreso, aunque no lo ven agrado. Una hipotética pérdida de la Generalitat por parte de Mas en 2003 realzaría la figura de quien encabezase la lista de CiU por Madrid, sobre todo si el PP pierde en 2004 su mayoría absoluta.
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