Interior negocia el cupo de polacos con el Gobierno de Varsovia

El Gobierno abrió ayer las negociaciones de un futuro convenio migratorio con Polonia, que regulará los cupos de trabajadores de ese país hacia España. La Delegación para la Extranjería y la Inmigración, que depende del Ministerio del Interior, emitió ayer un comunicado en el que afirma: 'Fernández-Miranda acuerda el contenido del convenio sobre regulación y ordenación de los flujos migratorios con Polonia'.

El comunicado del Gobierno dice: 'El secretario de Estado para la Extranjería y la Inmigración, Enrique Fernández-Miranda, y el subsecretario de Estado del Ministerio de Trabajo y Política Social de Polonia, Piotr Kolodziejczyk, han firmado esta mañana [por ayer], en la sede del Ministerio del Interior, el acta de la reunión bilateral hispano-polaca tras haber alcanzado un acuerdo en el contenido del convenio sobre regularización y ordenación de los flujos migratorios entre ambos países. El convenio, tras ser sometido a las consideraciones de ambos gobiernos, será firmado antes del verano'.

Fuentes de la Embajada de Polonia declararon a EL PAÍS que la reunión a que hace referencia el comunicado fue meramente protocolaria. 'Polonia no ha firmado nada hasta el momento. Como muy pronto, podría alcanzarse un principio de acuerdo dentro de un mes', precisaron.

La Delegación del Gobierno emitió su comunicado un día después de que el propio Fernández-Miranda anunciara: 'Esperamos firmar el convenio en junio, coincidiendo con el viaje a España del primer ministro polaco'.

'60.000 irregulares'

Ni el Ejecutivo de Varsovia, a través de su Embajada en Madrid, ni el español, a través de la Delegación del Gobierno para la Extranjería, han consultado el contenido del futuro convenio con los inmigrantes afectados, según Malgorzata Malasnicka, presidenta de la asociación hispano-polaca Fórum.

Polonia es, con Ecuador y Marruecos, uno de los tres países con los que el Gobierno quiere pactar la llegada de inmigrantes. De momento, sólo ha logrado un acuerdo con las autoridades de Quito. Los marroquíes mantienen congelado el documento que les presentó el anterior ministro del Interior, Jaime Mayor, porque rechazan la cláusula referente al retorno de sus ciudadanos en situación irregular.

La colonia polaca en España está formada por 9.088 personas regularizadas y otras 60.000 que carecen de documentación en regla, según su Embajada. Cada domingo, miles de ciudadanos de ese país de 40 millones de habitantes se reúnen en mercadillos, donde compran y venden alimentos de su tierra. Las furgonetas que sirven para traer estas viandas cruzan Europa varias veces al mes y sirven también para transportar personas, que pagan unas 20.000 pesetas (40.000 menos de lo que les costaría el viaje en avión) para que les dejen ante la casa de un compatriota afincado en España.