Padres de alumnos intoxicados en un colegio llevan el caso al juzgado

Los padres de 39 escolares del colegio público de Rincón de Bonanza (Orihuela) denunciaron ayer en el Juzgado de Guardia a una empresa que realizó hace dos meses la desinfección del centro con productos que presuntamente causaron lesiones leves a los niños. Los padres consideran que la mercantil que desinfectó las instalaciones escolares es responsable de un delito contra la salud pública.

Cuando los alumnos regresaron a las aulas tras la vacaciones navideñas encontraron el interior del colegio impregnado de un producto desinfectante. Los niños permanecieron unas horas en las clases antes de ser desalojados por sus padres, que después denunciaron que los pequeños sufrían diversos síntomas de intoxicación -irritaciones en la piel y afecciones oculares-.

Un mes después de la fumigación, a mediados de febrero, el Ayuntamiento promovió una inspección sanitaria de todos los alumnos; su resultado, según expuso el concejal de sanidad, Ginés Sánchez, determinó que los niños no sufrían dolencias significativas achacables a la fumigación. Pero los padres desconfían de esos resultados y exigen responsabilidades.

Según Vicente Martínez, abodado de los denunciantes, los productos que emplearon para desinfectar el colegio son 'altamente tóxicos', y como consecuencia de ello 'entendemos que se puso en grave peligro la salud de los niños', de tres años.