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LA PROTESTA DE LAS COMARCAS DEL SUR

El Ebro toma Barcelona

Barcelona fue tomada ayer por las Tierras del Ebro. Unas 200.000 personas, 120.000 según la Guardia Urbana y 300.000 según las plataformas ciudadanas creadas en las Tierras del Ebro, marcharon ayer por las calles más céntricas de la capital catalana para protestar contra el Plan Hidrológico Nacional (PHN), que prevé el trasvase de agua del Ebro hasta zonas tan lejanas como Almería, Murcia y Valencia.

La protesta de los manifestantes también iba dirigida contra las alegaciones presentadas al plan por el Gobierno de Jordi Pujol. Dichas alegaciones acceden al trasvase de agua, aunque a partir del lugar donde actualmente se toma la destinada a los regantes del delta del Ebro.

Entre los lemas más coreados por los manifestantes, que también fueron exhibidos en las numerosas pancartas que portaban, destacaban los siguientes: 'ganaremos la segunda batalla del Ebro', 'ni una gota más', 'queremos buenos gobernantes, al río los ignorantes', 'Pujol, Aznar, basta de caciquismo, un país no es una finca' y 'Pujol, revienta, el delta no está en venta'.

La concentración de manifestantes de las comarcas del sur de Tarragona fue un acto de protesta de dimensiones nunca vistas en las Tierras del Ebro.

Los propios organizadores reconocieron que no esperaban que la manifestación alcanzara tanto éxito de convocatoria, lo que les llevó a clamar al final del acto: 'Barcelona se mos ha quedat menuda!'.

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El listón, superado

La cifra de participantes que ofreció la Guardia Urbana, que se elevó a 120.000, hizo encoger la de 25.000 personas que se reunieron en Móra el pasado 4 de febrero. Y ello pese a que en aquella ocasión los portavoces de las plataformas convocantes ya describieron el éxito de la marcha como 'un listón muy alto que superar'.

Las 120.000 personas concentradas ayer en Barcelona, según cifras oficiales, equivale a toda la población de las comarcas del sur de Cataluña.

A los ciudadanos convocados por las plataformas de Tarragona, que reunieron más de cien autobuses, se sumaron partidos políticos, con la excepción de Convergència i Unió (CiU) y el Partido Popular (PP). También se adhirieron a la protesta sindicatos, entidades ecologistas y colectivos ciudadanos procedentes de los Pirineos, afectados por los 13 embalses previstos en el Plan Hidrológico Nacional.

Tampoco faltaron numerosos ciudadanos aragoneses, además de navarros, riojanos, vascos, murcianos y valencianos. Todos ellos ya han expresado su rotunda oposición al trasvase del Ebro. Fueron miles los vehículos particulares que se trasladaron desde el sur de Cataluña hasta Barcelona. 'No olvidaremos que CiU y el PP acordaron en el Parlament no rechazar el Plan Hidrológico', advirtieron los manifestantes.

Si el polémico plan se llevó, tal y como estaba previsto, el mayor protagonismo de la jornada, no fueron menos las pancartas y los eslóganes relativos a la implantación de una central térmica de gas combinado en Móra la Nova (Ribera d'Ebre) y al Mapa Eólico que ha diseñado el Gobierno catalán.

La concentración de ciudadanos en la plaza de la Universitat fue tal que cuando la cabecera de la marcha ya había llegado a su destino -la plaza de la Catedral-, millares de personas todavía no habían iniciado el recorrido.

De hecho, la Guardia Urbana se vio imposibilitada para ofrecer datos sobre el número total de participantes hasta pasadas las dos de la tarde, porque el gentío, harto de esperar sin avanzar en el punto de partida de la protesta, decidió tomar un recorrido alternativo y descender hasta la catedral por el Portal de l'Àngel.

Cuando llegaron, el manifiesto final de la protesta ya había sido leído por el escritor Ignasi Riera. En un principio, estaba previsto que la lectura le correspondiera al cantante Lluís Llach. Lo mismo había ocurrido en la protesta de Móra la Nova.

El manifiesto hizo hincapié en el lema de la manifestación, Por una nueva cultura del agua, y denunció el trasvase como un planteamiento obsoleto, insostenible desde el punto de vista económico y ecológico, 'una terrible amenaza para las Tierras del Ebro'.

Los niños, a la cabeza

La manifestación, que se inició puntualmente a las doce del mediodía, fue encabezada por un numeroso grupo de niños con una pancarta en la que se podía leer: 'El delta también es tuyo, salvémoslo', a los que seguían las tradicionales bandas de música de las poblaciones del delta, entre ellas las de Tortosa, Miravet, Deltebre y Sant Jaume d'Enveja. La música contribuyó a rodear la marcha de un aire festivo que el acto no perdió en ningún momento.

La pancarta de los políticos aunó a socialistas catalanes y aragoneses. Y también a representantes de CC OO, UGT y los partidos IC-V, ERC y EUiA, y las juventudes de Unió Democràtica.El ex ministro socialista aragonés Juan Alberto Belloch vaticinó que la manifestación de ayer es un preludio a la prevista por la misma causa en Madrid el próximo 11 de marzo y recordó que las razones para oponerse al Plan Hidrológico Nacional 'no son sólo territoriales, sino por la defensa de un modelo, contrario a la infraestructura de cemento, que sólo beneficiará a grandes intereses empresariales de las constructoras'. Belloch subrayó que, a su juicio, el PHN podría haber sido definido por su compatriota Joaquín Costa, 'pero no en el año 2001'.

Por su parte, el líder de los socialistas catalanes, Pasqual Maragall -que se incorporó al final de la manifestación-, recordó que ésta era 'una defensa del agua y del territorio y un grito de la gente a favor de la naturaleza'. Maragall explicó que su partido estudiará adherirse a las alegaciones que presentará el Gobierno de Aragón al plan gubernamental.

El republicano Josep Lluís Carod Rovira señaló que su asistencia a la concentración se hacía por la defensa de un modelo de país 'racional y solidario, que reparta sus bienes y que no condene a la marginalidad a las Tierras del Ebro'.

La manifestación, que tardó más de dos horas en disolverse después de que los organizadores la dieran por acabada, finalizó en la plaza de Sant Jaume, donde los miembros de las plataformas plantaron un molino de viento de cartón y esparcieron sal por el suelo para simbolizar el proceso de salinización al que se someterá al Delta en caso de llevarse a cabo el trasvase.

Respuesta de Aragón

Uno de los grupos organizadores, la Plataforma en Defensa del Ebro, cifró en 20.000 personas las procedentes de las comarcas de Tarragona que llegaron a Barcelona en autobuses, servicios ferroviarios ampliados por Renfe o en coches particulares. Según Manel Tomàs, portavoz de esta plataforma, la incidencia de la manifestación no hubiera sido la misma sin la colaboración de las más de 100 entidades que se adhirieron a la protesta, muchas de ellas de Barcelona.

El portavoz, asimismo, hizo hincapié en la respuesta obtenida en Aragón. Además de las poblaciones pirenaicas afectadas por la construcción de embalses prevista en el PHN, se unieron municipios tan dispares como los pertenecientes a la comarca del Matarranya, fronteriza con Tarragona, o los de la provincia de Teruel, que esgrimieron una pancarta con su conocido eslogan de 'Teruel también existe'.

Como cabezas visibles, aunque no detrás de las pancartas oficiales, procedentes de Aragón se vio al diputado de la Chunta Aragonesista, José Antonio Labordeta, o al dramaturgo Javier Tomeo.

La unión entre las poblaciones de Aragón y las del sur de Cataluña, histórica, fue muy resaltada en el transcurso de la manifestación y se rechazó que los aragoneses trataran de manipular la misma por el pacto del agua alcanzado con el Gobierno: 'Estamos todos contra el PHN y, por una vez, haremos caso al presidente de la Generalitat: iremos a Madrid a protestar por el plan del Gobierno', tronó Tomàs ante el micrófono de la catedral.

Los organizadores del acto, tan sólo para informar sobre la evolución de los manifestantes de Tarragona, utilizaron cerca de 60 teléfonos móviles.

Alrededor de 120 autobuses salieron ayer de las Tierras del Ebro con destino a Barcelona. La autopista A-7, alrededor de las nueve de la mañana, estaba repleta de autobuses de distintas compañías (la flota entera de la provincia se dedicó al evento), y de coches particulares que blandían en sus parabrisas traseros eslóganes contrarios al PHN.

La toma de la capital catalana había sido diseñada desde hacía varias semanas.

Un grupo de niños, a la cabeza de la manifestación contra el Plan Hidrológico Nacional.
Un grupo de niños, a la cabeza de la manifestación contra el Plan Hidrológico Nacional.VICENS GIMÉNEZ

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