Indefensión y tragedia
Una vez más me sorprende y me horroriza ver cuánta violencia puede existir en el ser humano. Me refiero al hombre que el pasado 14 de febrero se dio a la fuga después de haber matado a su vecino y malherido a familiares con una escopeta por ser éstos muy ruidosos, además de poco respetuosos.
Está claro que, frente a hechos como éstos, la mayoría esperamos que encuentren muy pronto a este señor y se haga justicia. Pero mi reflexión va un poco más allá: ¿cuántas decenas de denuncias habría puesto este señor sin obtener ninguna solución al respecto por parte de las autoridades? ¿Cuántas veces habría llamado a la Guardia Urbana para avisar de que a altas horas de la noche tenían el televisor a todo volumen, sin obtener ninguna solución definitiva al problema? Por desgracia, sólo las personas que nos encontramos en situaciones parecidas sabemos el desequilibrio que se padece frente a tales agresiones acústicas y cuán desprotegidas estamos ante la ley.
Me pregunto hasta qué punto 'la ley' no induce, por desgracia, al ciudadano víctima a realizar escalofriantes y horribles hechos como éstos.-
