Los inmigrantes encerrados en Almería y Lepe mantendrán la protesta hasta obtener 'papeles'
Aunque los responsables de la Universidad de Almería afirman tener las puertas abiertas al diálogo con los inmigrantes, ayer se estableció un dispositivo especial y se solicitó a las personas que pretendían entrar en las instalaciones que se identificasen. Además, se incorporaron una veintena de nuevos vigilantes. Un responsable de la Universidad dijo que se trataba de una 'medida de seguridad con el fin de garantizar la actividad docente'. También aseguró que, desde el primer momento, ofrecieron a los inmigrantes 'unas instalaciones dignas, amplias y seguras, con servicio de duchas, aseos y vestuario para que pudieran pernoctar lo más dignamente posible'. Según las mismas fuentes, este ofrecimiento fue rechazado por los inmigrantes, que decidieron permanecer en el edificio central de la Universidad, donde se registraron algunos enfrentamientos con periodistas y vigilantes.
La Cruz Roja se reunió con los responsables de la Universidad de Almería y puso a disposición de los encerrados 110 mantas, objetos de aseo y comida. También han ofrecido su colaboración el Centro de Acogida Municipal, la Delegación de Asuntos Sociales y la Diputación.
La situación en Lepe no es muy diferente. Los inmigrantes encerrados, también desde el lunes, en el polideportivo continuarán la protesta. Los extranjeros hicieron un llamamiento a otros colectivos para unirse a la protesta y presionar a las Administraciones para la concesión de contratos, papeles y viviendas dignas.
La concejala de Asuntos Sociales, María Bella Martín, del PSOE, insistió ayer en que el Ayuntamiento carece de competencias para atender las demandas de los inmigrantes en Lepe, procedentes de Ecuador, Marruecos, Rumania, Bulgaria, Portugal, Brasil, Polonia, Letonia y Rusia. Insatisfecho por la respuesta municipal, Desio Machado, portavoz de la Organización Democrática de Inmigrantes Trabajadores en España (Odite), advirtió: 'Si no se llega a acuerdos inmediatos, los ánimos pueden encresparse'. Machado explicó que la falta de alojamiento obliga a muchos temporeros a dormir en la calle y pidió módulos de viviendas. La concejal afirmó que esta propuesta supone la creación de un gueto y que son los empresarios los que tienen que responder a la demanda de contratos.
Ante la situación creada por la inmigración, el andalucista Juan Carlos Soriano pidió la creación de un estatuto especial para Andalucía.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.