La universidad vasca da sus primeros pasos en la enseñanza por Internet

El nuevo ídolo, la nueva reencarnación del progreso se llama nuevas tecnologías y en su base se halla Internet. Por ello, los centros universitarios vascos han fijado su mirada en el infinito espectro de opciones que ofrece este océano de información. Una de ellas es la que afecta a uno de sus dos ejes: la enseñanza.

Junto a las aulas llenas de pupitres y el contacto directo y cercano entre el profesor y el alumno, la tres universidades vascas han empezado su andadura en la creación de un espacio educativo paralelo y complementario al anterior que condensa en la pantalla de un ordenador pizarra, apuntes y explicaciones.

En los tres casos, la oferta existente en la actualidad es limitada y muy específica. La mayor corresponde a la UPV. En estos momentos, sus alumnos pueden elegir entre la treintena de asignaturas que contiene el Campus Virtual, como denomina la propia universidad a esta iniciativa.

Carácter experimental

No obstante, según el vicerrector de Ordenación Académica de la UPV, Enrique Amezua, esta experiencia, iniciada el pasado curso con 12 materias, mantiene aún un carácter 'cuasi-experimental'. Explica que 'por esta razón los estudiantes sólo pueden escoger asignaturas de libre elección no vinculadas a una carrera determinada. Pese a ello, también se ofrece Internet como herramienta docente en algunas materias de carreras concretas para realizar ejercicios o prácticas'. De este modo, son cerca de un millar los alumnos que de una u otra forma lo utilizan.

Diferente es el enfoque que se le da en la Universidad de Deusto, que centra su atención en los títulos de posgrado. En concreto, este año se imparten dos de manera íntegra en Internet. Uno de ellos aborda el Derecho Foral vasco y va dirigido principalmente a magistrados.

El segundo pretende formar a expertos en evaluación educativa. Éste último cuenta en su segundo año con un total de 60 matriculados, todos ellos profesionales de la educación en activo que, en su mayoría, ejercen su profesión en países de Latinoamérica.

A juicio del director de este curso y también responsable del Instituto de Ciencias de la Educación de Deusto, Josu Solabarrieta, la educación virtual supone un triple reto para profesores y alumnos. 'En primer lugar, la elaboración de materiales didácticos que realmente funcionen. En segundo lugar, la redefinición del profesor, que tiene que asumir nuevos papeles, con otras prioridades y estrategias a las que utiliza en la clase presencial. Y, en tercer lugar, el papel de los propios alumnos, que se encuentran ante una situación muy diferente de la clase tradicional que les exige iniciativa y regularidad en el esfuerzo por aprender', analiza.

Así ocurrirá en el seminario sobre mercados financieros que pondrán en marcha Mondragon Unibertsitatea y la Sociedad de Estudios Vascos-Eusko Ikaskuntza en marzo y que se desarrollará en la red. Material enviado por correo electrónico y acceso a una página interactiva donde se podrá consultar material adicional, plantear dudas y realizar pruebas y prácticas, son las características del último ejemplo de un instrumento educativo que apenas ha comenzado su andadura.