Los 'secretos' de la Iglesia católica
A los teólogos les siguen fascinando más los misterios que las certezas, a juzgar por la reacción del secretario de la Comisión para la Doctrina de la Fe en la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino. Este teólogo, jesuita y profesor en la Universidad Pontificia de Comillas, expresó ayer la satisfacción desde el punto de vista de la antropología cristiana por la publicación del genoma humano, pero advirtió de que el descubrimiento 'no podrá desvelar nunca el secreto del ser humano'.
El miedo a la ciencia, comprensible entre los teólogos desde el maltrato que la jerarquía dispensó a Galileo, no arredró a Martínez Camino. Ve en el desciframiento del genoma una ayuda para entender la vida, pero cree que 'no aportará nada, cualitativamente, a la comprensión de la vida humana, de la que ya la filosofía y la fe han aportado sus claves'. 'Decir que el secreto de la humanidad está en los genes es apresurado e infundado. La dignidad humana no está en los genes. Es una convicción filosófica y moral que tiene sus fuentes propias y válidas por sí mismas y no dependen del empirismo científico', explicó a la agencia Europa Press.
El director en España de la poderosa comisión doctrinal que coordina el cardenal Ratzinger reflexionó también sobre el hecho de que el genoma humano no sea mucho más complejo que el de otros seres vivos, incluso los más primarios. Confirma la vinculación profunda del ser humano con toda la comunidad de la vida, pero 'no presupone que seamos equiparables a otros seres, puesto que somos los únicos en la creación que lo sabemos', comentó.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.