La conciliadora Núria de Gispert releva a Duran en Gobernación
El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, quiso zanjar ayer mismo la crisis de gobierno desencadenada por la dimisión de Josep Antoni Duran y nombró en su puesto a Núria de Gispert, presidenta del consejo nacional de Unió y hasta ahora consejera de Justicia. Pujol situó en esta cartera al jurista independiente Josep Delfí Guàrdia Canela, un hombre de la confianza de De Gispert. Ambos tomarán posesión de sus nuevos cargos hoy, con lo que el presidente de la Generalitat dejará cerrada su segunda crisis de Gobierno.
Núria de Gispert, de 51 años, fue uno de los nombres que Duran sugirió a Pujol para sucederle. Cuando a las nueve de la mañana cruzó la puerta del Palau de la Generalitat, el dirigente democristiano llevaba una terna en el bolsillo. Pero tenía la seguridad de que Núria de Gispert sería la elegida.
De Gispert milita en Unió Democràtica desde 1986 . Funcionaria por oposición en la Diputación de Barcelona (1974), en mayo de 1980 fue adscrita al Departamento de Justicia. Aunque democristiana, ha sido la impulsora de iniciativas legislativas que han desagradado en círculos religiosos conservadores. Por ejemplo, la llamada ley de parejas de hecho, iniciativa pionera en España que reconoce los derechos y obligaciones de este tipo de uniones. De Gispert también ha dado su apoyo al llamado testamento vital, que recoge el derecho a una muerte digna.
En el terreno partidista, la nueva consejera de Gobernación forma parte del sector de Unió más proclive al acuerdo con Convergència. Preside la comisión negociadora junto a Xavier Trias -por CDC-, que busca un pacto para refundar la coalición.
Sustituto urgente
El nombramiento de Núria de Gispert obligó a Pujol a buscar urgentemente un sustituto para Justicia, departamento dirigido por De Gispert desde 1995. Ésta recomendó el nombre de Josep Delfí Guàrdia Canela, de 55 años, un jurista independiente que fue estrecho colaborador del primer consejero de Justicia de Jordi Pujol, Ignasi de Gispert, padre de Núria de Gispert. Desde entonces, Guàrdia Canela ha seguido colaborando con Justicia, pero siempre desde una perspectiva técnica, no política.
El nuevo consejero no ha militado nunca en ningún partido y también ha colaborado con el Gobierno de izquierdas del Ayuntamiento de Barcelona como director de la asesoría jurídica de Transportes Metropolitanos. Guàrdia aceptó el cargo tras entrevistarse por la tarde con Pujol y expresó que una de sus prioridades será acabar la compilación del código civil catalán. Josep Guàrdia, natural de Lleida, es miembro de la comisión jurídica asesora de la Generalitat. Ha sido presidente de la Academia de la Jurisprudencia de Cataluña, cargo del que cesó en diciembre tras ocho años de mandato.
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