Ibarra y Bono apoyarán en el Congreso el plan hidrológico del PSOE

La votación a favor del PHN en el Consejo Nacional del Agua de las comunidades de Extremadura y Castilla-La Mancha no es motivo de fiesta para la dirección del PSOE, pero tampoco es un drama, según miembros de la ejecutiva federal, y su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, ve 'lógico' que Ibarra y Bono 'defiendan los intereses de sus regiones, que para eso han sido elegidos'. Ibarra apostilla que 'no hay ningún conflicto con la ejecutiva'. Tanto él como el vicepresidente castellano-manchego, José María Barreda, afirman que los diputados nacionales de ambas circunscripciones votarán 'con todos los socialistas como un bloque de cemento, sin fisuras' el plan alternativo que presente el PSOE.

La doctrina del PP sobre el PHN la volvió a dictar ayer mismo en Santiago José María Aznar. Y sobre el carácter de hito histórico y de plan para 'cohesionar y fomentar la solidaridad en España', nadie marca en el PP la más mínima distancia. Aznar aprovechó el acto de proclamación de Manuel Fraga como candidato a la Xunta de Galicia para anunciar que el Consejo de Ministros aprobará el PHN el viernes y lo remitirá ese día a las Cortes.

'Lo vamos a hacer'

Aznar subrayó ayer así que ese PHN 'no es el proyecto de un partido, sino vital para la cohesión de España' para poner en evidencia de nuevo la presunta división e incoherencia del PSOE. Y despejó cualquier duda sobre su intención, 'determinación y coraje' para llevarlo adelante: 'Lo vamos a hacer'.

Los socialistas aseguran ser conscientes de la dificultad de explicar que en el Consejo del Agua dos comunidades gobernadas por ellos votaron a favor de la oferta para sus regiones del PP, en tanto que en el Parlamento todos los socialistas votarán contra del plan global del Gobierno y apostarán por el suyo, que elabora la ejecutiva federal bajo la dirección de la responsable de Medio Ambiente, Cristina Narbona. 'Quien no lo entienda es que sigue sin asumir que España es un Estado autonómico', dijeron a este periódico Rodríguez Ibarra y el vicepresidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda. Los argumentos de ambos fueron muy similares: se acudió al Consejo del Agua en calidad de gobernantes autonómicos 'y no como delegados del PSOE'. 'Pusimos el listón muy alto y el Gobierno nos concedió demandas de Castilla-La Mancha muy queridas desde antiguo', relató Barreda. 'Las inversiones necesarias para Extremadura fueron concedidas y pasaron de una inicial de 177.000 millones a 203.000, finalmente', señaló el presidente extremeño. Ayer Ecologistas en Acción en Castilla-La Mancha manifestó su sospecha de que la postura del Gobierno regional en el Consejo del Agua podría deberse a 'contrapartidas' recibidas de Madrid, informa Efe.

El día anterior al Consejo del Agua Ibarra comunicó a Zapatero que iban a votar a favor porque las demandas de Extremadura estaban satisfechas. 'Zapatero me dijo que la opinión del partido iba a ser contraria y que iba a elaborarse un plan alternativo, pero que yo hiciera lo que creía que debía hacer en interés de mi región', narró. 'Es descabellado pensar que Castilla-La Mancha votó a favor para castigar a Zapatero', remató Barreda, miembro de la ejecutiva federal.

Nada muy diferente dijo el pasado jueves el líder del PSOE, que acudió a visitar la feria de Turismo Fitur 2001 en Madrid. 'España es un Estado autonómico y quienes representan a las comunidades tienen que defender sus intereses territoriales, por lo que me parece razonable y lógico que los presidentes de Extremadura y Castilla-La Mancha hayan adoptado esta postura'.

Pero la crítica al PHN no ha descendido un ápice en el PSOE e incluso las cesiones que el Gobierno ha hecho por comunidades 'son pan para hoy y hambre para mañana', dijo Zapatero. 'Nuestra propuesta va a ser mucho más clara, imaginativa, moderna y con visión de futuro porque el plan del Gobierno podría haberse adoptado hace 30 o 40 años'.

En el plan socialista se harán propuestas para toda España, no sólo sobre el trasvase del Ebro, pero recogerán fielmente para Castilla-La Mancha y Extremadura las propuestas que para ellas ha hecho el Gobierno, afirmaron desde la dirección del PSOE. Tanto Barreda como Ibarra aseguran que no han recibido ni una sola recriminación de la ejecutiva federal. 'Decir que hay conflicto en este tema es una auténtica maldad y el PP debía responder a la pregunta de qué votaría en Aragón si gobernaran ellos en vez de los socialistas', dijo Ibarra.

Aznar no desaprovechó ayer la ocasión de lanzar una advertencia al presidente socialista de Aragón, Marcelino Iglesias, que rechaza frontalmente el PHN e incluso ha acudido a Bruselas a interesarse por la supuesta financiación de la Unión Europea al proyecto. Aznar le auguró que tendrá muy difícil explicar a sus ciudadanos y votantes cómo pelea para 'perjudicar sus intereses'.

El PP se ha mantenido muy sólido en la defensa de estas tesis de Aznar. En los foros y debates internos sobre el PHN apenas ha habido discrepancias públicas. Incluso los hasta hace poco indiscutibles líderes del PP de Aragón, como el ex presidente autonómico Santiago Lanzuela o la ex alcaldesa de Zaragoza y ahora presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, se han pronunciado a favor del plan, que en su comunidad ha suscitado un rechazo general. Sólo el ex alcalde de Huesca, número uno ahora por el PP en esa provincia y ex dirigente del PAR, Luis Acín, expresó algunos reparos que han sido convenientemente silenciados. El PP ha montado campañas informativas y de publicidad en Aragón para contrarrestar la oposición al plan. No han surtido gran efecto. Eso sí, Lanzuela, que fracasó en las últimas elecciones autonómicas, ha sido relevado al frente del PP de Aragón y, con la marcha definitiva a Madrid de Rudi, ha dejado la región sin referente político.

En Tarragona, algunos diputados del PP han recriminado al ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, el peligro del trasvase sobre el ya depauperado delta del Ebro. Matas ha acallado esos temores y ha prometido, con una serie de millonarias obras, que ese ecosistema privilegiado no se resen-tirá.