_
_
_
_
_

Cervera pide al líder de EU que dimita por denunciarlo sin pruebas

El ex consejero estudia acciones legales contra Joan Ribó

El ex consejero de Sanidad José Emilio Cervera reclamó ayer la dimisión como parlamentario del coordinador general de Esquerra Unida, Joan Ribó, tras anunciar la retirada de la querella presentada en su contra por los supuestos delitos de tráfico de influencias y fraude. Eduardo Zaplana también criticó ayer en Alicante a Ribó, del que dijo que si fuera él 'estaría muerto de vergüenza' después de que EU solicitara el sobreseimiento de la causa. Joan Ribó afirmó que no dimitirá y que sigue viendo indicios de delito.

José Emilio Cervera calificó la querella interpuesta en su contra por parte de Esquerra Unida el 15 de mayo de 2000 en el Tribunal Superior de Justicia de 'serial bastardo y falso producto de un montaje político para mitigar los sucesivos fracasos electorales del partido de Ribó'. EU anunció el viernes la retirada de la querella interpuesta por falta de pruebas y el sobreseimiento de la causa penal.

El ex consejero de Sanidad del PP dijo que si Joan Ribó 'conserva su dignidad debe devolver su escaño a la democracia y someterse a una investigación similar'. 'Si la querella es infundada, Ribó debe asumir las responsabilidades políticas y, además, es necesario que comparezca inmediatamente en las Cortes Valencianas', sentenció Cervera, que manifestó que su dimisión como consejero fue por voluntad propia y con la finalidad de que el Consell no se viese afectado.

El ex responsable de Sanidad dijo que en todo el proceso se había 'sentido absolutamente respaldado por el PP' y que había contado con 'la máxima confianza' del presidente de la Generalitat.

Eduardo Zaplana acusó a Esquerra Unida de 'ofender el honor' tanto al ex consejero de Sanidad José Emilio Cervera como al propio gobierno de la Generalitat después de que esta formación pidiera el archivo de la querella presentada. 'Esto no es de recibo, y si yo fuera Ribó estaría muerto de vergüenza'. El dirigente del PP acusó a EU de 'judicializar' el debate político y consideró que las 'amplísimas' acusasiones de esta formación contra el ex consejero son 'un disparate', ya que ahora se demuestra que 'no tenían pruebas'.

El presidente de la Generalitat se preguntó si 'aquí uno puede hacer lo que quiera sin que nadie pueda pedir responsabilidades por ello'. Eduardo Zaplana, visiblemente molesto, dijo: '¿Pero a qué estamos jugando, a desprestigiarlo todo a costa de lo que sea? ¿A decir que como yo no estoy en el poder me lo cargo todo?', se preguntó el presidente del Consell, quien concluyó: 'En el debate político todo está permitido, pero en el judicial cuando uno lo abre tiene que ser consecuente con el resultado'.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Por su parte, Joan Ribó ya adelantó ayer que no renunciará a su acta de parlamentario e insistió en que sigue considerando que 'hay indicios de irregularidades en el comportamiento de Cervera'.

'El comportamiento de Cervera es ética, política y administrativamente incorrecto, aunque no se han hallado pruebas documentales ni testimoniales concluyentes para acusar formalmente al ex consejero', señaló Ribó. 'Algo hubo cuando Cervera dimitió o el presidente de la Generalitat le cesó en su cargo', añadió el coordinador general de EU.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_