UGT denuncia la expulsión de una profesora por 'intimar' con un hombre separado

La federación sindical de enseñanza FETE-UGT denunció ayer el despido 'improcedente' de dos trabajadores en el colegio Oratorio de Orihuela, un centro de enseñanza privado y concertado. El sindicato acusó además a la dirección del colegio de realizar prácticas inquisitoriales contra los trabajadores.

El responsable sindical de UGT, Jesús Cañizares, criticó el despido 'improcedente' de dos trabajadores del mencionado centro, 'porque no se ajusta a las normas vigentes de la LODE'. Cañizares dijo que a uno de los docentes afectados [una profesora] no se le renovó el contrato 'por cometer el inmenso delito de mantener relaciones sentimentales con un separado'. Algo que no se ajusta a las normas del colegio religioso pues al realizar este el contrato a un trabajador se le pide que se declare de religión católica y que tiene que seguir las normas establecidas por dicha religión. UGT entiende que el despido es 'improcedente' porque no se ha tenido en cuenta la valía de estos profesionales de la enseñanza, sino otros motivos ajenos, como que no practique una vida acorde con una religión.

El sindicalista destacó otros ejemplos de 'acoso y represión' a los profesores, 'al más puro estilo pinochetista, dictatorial' y explicó que 'la dirección del centro realiza inspección sorpresa a las clases de los profesores que considera más rebeldes para comprobar que se siguen los programas acordados'. Dijo que a los contratados solo se les renuevan el contrato si aceptan una reducción en sus horas.

Este periódico intentó ayer sin éxito conocer la opinión de la direción del colegio sobre la denuncia de UGT.