La crisis del Ballet Nacional de España amenaza sus giras internacionales

El Ballet Nacional de España partió ayer, día 26, para Lisboa, donde tiene previsto actuar en el Auditorio de Belem desde hoy y hasta el día 31. Los días 2 y 3 de febrero lo hará en Oporto. Todas las entradas están vendidas, pero la sombra de la huelga se cierne sobre esta gira. Los conflictos laborales y el cúmulo de denuncias ante el Ministerio de Cultura y los tribunales ordinarios han creado una verdadera crisis de difícil solución.

Los bailarines del BNE y de la Compañía Nacional de Danza decidieron ayer convocar paros en los próximos días para mostrar su rechazo al preacuerdo suscrito entre Administración y sindicatos sobre su incorporación al Convenio Único de los trabajadores públicos, según informa Efe. Los paros afectarán, según el comité de huelga, a la gira por Portugal del BNE y a las actuaciones en Australia de la CND. En dicho preacuerdo, el grupo artístico de bailarines queda sin clasificar, ya que para acceder al nivel 1 necesitan de titulación superior, lo que no está contemplado en la legislación y está pendiente de resolución por parte del Ministerio de Educación.

Antonio Najarro, primer bailarín del BNE, relata: 'Fuimos a la plaza del Rey a una manifestación sobre el convenio único, no a que se insultara a nuestra directora. En el BNE los artistas están contentos y trabajan a gusto'. Los descontentos aseguran que hay más de 30 denuncias acumuladas en el Ministerio de Cultura contra Aída Gómez, su gestión y su equipo, cursadas por el comité de empresa o a título personal por los agraviados.

Carlos de la Torre, secretario general del Inaem, dice: 'El Inaem no tiene nada que ocultar y ha respondido escrupulosamente a los requerimientos de los bailarines'.

No piensa lo mismo Sergio García, un joven bailarín al que después de estar dos temporadas en la compañía no le fue renovado el contrato a mediados de 2000. 'No puedo comprender qué anima a Aída Gómez a actuar de manera tan cruel con algunos bailarines', afirma. 'En mi caso es absurdo que exprese que yo no estoy preparado para ciertos estilos, cuando ya bailé anteriormente en su compañía privada y en el BNE llegué a tener papeles protagonistas por los que fui felicitado por ella. Otra cosa es que, en su momento, me negué a firmar una carta de apoyo incondicional a su gestión, y de ahí creo que surgieron las represalias'.

La primera bailarina Maribel Gallardo también ha denunciado a Aída Gómez, que responde: 'Se están mezclando las cosas. El caso de Maribel Gallardo es que a mí me ha tocado hacer la parte dura: la de su retirada del escenario'.

La cantaora Ana Ramón y el guitarrista Antonio Amaya también han dirigido sendos escritos a la ministra Pilar del Castillo. El primero se queja de que no se le renovó el contrato al no querer firmar la adhesión a la directora; la segunda dice en su escrito que hay muchos trabajadores que no soportan la presión y terminan en el psiquiatra. Aída Gómez dice: 'No es cierto, a menos que disciplina pueda ser entendida como maltrato'.