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El Ministerio de Trabajo investigará los negocios del presidente de ANDE

Las empresas de sus hijos facturan supuestamente con la entidad

El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales ha solicitado una auditoría externa con efecto desde 1995 a la Asociación Española para Personas con Discapacidad Psíquica y Personas Mayores (ANDE) tras hacerse públicos los supuestos negocios y propiedades de su presidente, Fernando Martín Vicente, y de sus familiares con la entidad. ANDE ha recibido casi 2.000 millones de subvenciones públicas desde 1996, en su mayoría procedentes del Ministerio de Trabajo.

La auditoría externa, que será encargada a una firma acreditada, tratará de esclarecer, según una nota oficial, 'todas las cuestiones relacionadas con las subvenciones concedidas por el Ministerio de Trabajo a ANDE', con el objetivo de preservar 'el empleo y la capacidad asistencial de la organización'. En esta línea, el ministerio recuerda que, junto con la Intervención General de la Administración del Estado, ha ejecutado controles a las subvenciones concedidas a ANDE, sin que hasta la fecha se hubiera detectado ningún incumplimiento.

Entre las entidades subvencionadoras de ANDE figuran los ministerios de Trabajo y Justicia, las administraciones autonómicas de Madrid y Andalucía, Cajamadrid y los ayuntamientos de Alcorcón, Coslada, Talavera y Sevilla.

En su comunicado, el Ministerio de Trabajo concluye expresando su confianza en el movimiento asociativo del sector de los discapacitados más allá de las presuntas irregularidades de una persona concreta y de determinada asociación.

La auditoría tendrá que investigar las supuestas facturaciones a ANDE, reveladas por El Mundo, de las empresas de los hijos de Martín (las sociedades Merideys y Cocoblaster) y que suman unos 23 millones en los últimos años. El estudio contable también analizará cómo se gastaron 450 millones de pesetas que bajo el título 'Inserso: viajes y vacaciones' recibió supuestamente ANDE, y cuya coordinación llevaba su propio hijo, José Manuel Martín; y cuya directora era su esposa, Luz Elena Bermúdez.

Otro aspecto del estudio es por qué figuran en los balances de ANDE como acreedores las asociaciones supuestamente no lucrativas que gestionan edificios cuya propietaria es precisamente ANDE. Entre tales acreedores figuran las residencias San Vicente (unos 11 millones anualmente), Carmen Sevilla (unos 41 millones anuales, y 106 millones en el año 1998); Suiza Santa Rita (21 millones); San Vicente (10 millones); Carmen Sevilla II (entre 7 y 26 millones, según los años). Estos teóricos acreedores de ANDE figuran como parte del inmovilizado material de ANDE, dentro del capítulo de 'edificios y otras construcciones'.

Otro apartado donde fue a parar el dinero de la entidad es la propia Fundación ANDE, que preside Fernando Vicente Martín y cuya tesorera es su esposa. A esta fundación le inyectó en 1999 unos 43 millones de pesetas. En las cuentas de esta última entidad se despachan como gastos 'por otros servicios' 400 millones de pesetas. La Fundación ANDE Iberoamericana también la preside Martín Vicente. Este periódico trató ayer sin éxito de recabar su versión.

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