El Ayuntamiento prepara un reglamento que abre al vecindario las comisiones de control
El Ayuntamiento está a punto de dotarse del primer reglamento que agilice el funcionamiento de la corporación, marque claramente las reglas del juego y ponga fin a las reiteradas críticas de la oposición por las dificultades que encuentra tanto para acceder a los expedientes de los asuntos que se tramitan como al actual sistema de plenos. Éstos, que se celebran con periodicidad mensual, acumulan en el orden del día todos los temas de las diferentes áreas (Urbanismo, Hacienda, Medio Ambiente, Policía Municipal, Tráfico, Sanidad, Obras, etcétera) que se encuentran en tramitación, bien para su adjudicación definitiva o bien en alguna fase del obligado proceso de información y control por parte de la oposición. En la actualidad, el Ayuntamiento que preside José María Álvarez del Manzano no tiene reglamento propio, sino que se rige por la norma válida para todas las corporaciones locales.
Todos los asuntos del pleno han debido pasar previamente por las comisiones correspondientes, pero éstas tienen hoy un carácter meramente informativo. Por eso, para que la resolución sobre los diferentes puntos cuente con el apoyo o el rechazo de la oposición, ha de adoptarse necesariamente en el pleno, donde vuelven a reproducirse los mismos debates. Sucede, además, que no existe un reglamento que regule los tiempos de intervención que corresponden a los portavoces de cada uno de los grupos presentes en el Consistorio.
Esta forma de funcionamiento, unida al hecho de que las sesiones plenarias no se interrumpen a media jornada para el almuerzo, ha llevado a los ediles a quejarse de un sistema de trabajo que consideran reiterativo y poco eficaz. Hay que tener en cuenta que, con frecuencia, el orden del día del pleno acumula más de 100 puntos, y aunque los concejales ocupan sus escaños a las nueve de la mañana, no los pueden abandonar hasta media tarde.
Modificación legal
De salir adelante el nuevo reglamento que todavía se negocia entre el PP, el PSOE-Progresistas e IU, muchos de los asuntos llegarán al pleno ya aprobados, ya que las comisiones dejarán de ser informativas y tendrían carácter ejecutivo y resolutivo sobre los asuntos sometidos a estudio. En caso de aprobarse este punto del futuro reglamento, el Ayuntamiento deberá solicitar del Gobierno regional una modificación legal que así lo permita. Pero fuentes municipales creen que la Comunidad no pondría obstáculos, puesto que tal posibilidad está contemplada en el Pacto Local y, de hecho, en el Consistorio barcelonés ya hay comisiones que tienen poder decisorio.
Aquellos puntos que se considere que deben debatirse en el pleno contarán, por primera vez, con un tiempo determinado para la exposición de las posiciones de cada uno de los grupos. Así, el concejal que actúe de ponente contará con 10 minutos para su exposición. Los representantes de los otros grupos dispondrán de cinco minutos cada uno en su turno de intervenciones. Podrá intervenir más de un concejal de un mismo grupo, pero tendrá que repartir con su compañero los cinco minutos que tienen adjudicados. En el caso de que se produzca un segundo turno de intervenciones, el tiempo para cada grupo se limita a tres minutos. Esto supone que cada punto a tratar contará, como máximo, con 29 minutos de debate.
Ajustarse a estas limitaciones en el tiempo de intervenciones va a ser, según las fuentes consultadas, uno de los puntos del nuevo reglamento que supondrá más dificultades de adaptación para los ediles, ya que los puntos más conflictivos de cada pleno suelen acaparar ahora una hora de debate.
El reglamento en ciernes especifica que todos los concejales tienen derecho a obtener del alcalde -o de los concejales en quienes delegue- y de la comisión de Gobierno cuantos antecedentes, datos o informaciones dispongan sobre un tema concreto.
Los concejales de la oposición se han quejado reiteradamente de las dificultades que encuentran para acceder a los expedientes e informes que acompañan las decisiones del Gobierno municipal. Los expedientes, con frecuencia, se encuentran incom-pletos. Por ese motivo, los portavoces del grupo PSOE-Progresistas e Izquierda Unida abandonaron en diciembre pasado la comisión informativa de Medio Ambiente, que se había cambiado tres veces de fecha y hora. A pesar de ello, los expedientes referidos a tres de los puntos del orden del día estaban incompletos y los concejales de la oposición no contaron con los dos días de plazo que está actualmente estipulado para analizarlos, ya que un acto público impidió el acceso a la saleta de la Paloma, donde suelen exponerse los documentos.
El nuevo reglamento especifica que los expedientes aprobados por el pleno o por la comisión de Gobierno estarán a disposición de cualquier concejal 'durante el plazo de tres días'. Cuando los expedientes sean muy voluminosos, el plazo puede ampliarse hasta cinco días.
