El éxito de público de la Catedral Vieja de Vitoria desborda las previsiones y abre otro foco turístico

Con la Catedral funciona el famoso lema de la arruga es bella. Lo atractivo del edificio no es el exterior, construido sin una técnica uniforme, con saltos en el tiempo y decenas de parcheos. Su excepcionalidad radica en el interior, 'porque está tambaleándose y por su origen militar, y no sólo por su historia, sino también por las soluciones que se le están dando a la restauración y porque puede verse arqueología en directo', explicó ayer Gonzalo Arroita, el director de la Fundación Santa María. Arroita incluso aseguró que se han producido hallazgos de relevancia arqueológica al tiempo en que había visitantes en el interior.

Pese a que la campaña divulgativa sólo se ha difundido en Vitoria y sin apenas tiempo sufiente, los organizadores de las visitas tuvieron que ampliar el programa. Finalmente, transcurrió entre los pasados meses de julio y diciembre. Se habían fijado un límite de 18.000 personas, para no perjudicar el desarrollo de las obras, pero el número final llegó hasta las 25.000 visitas. De ellas, el 60% correspondió a residentes en Vitoria y casi otro 18% fueron personas procedentes de otros lugares del País Vasco o Navarra.

También se ha registrado un volumen inesperado de turistas de otros lugares: un 12% procedía de otras regiones españolas (Cataluña, Madrid y Valencia, principalmente) y otro 10% llegó de un total de 52 países extranjeros. Según los datos de que disponen los organizadores del programa, la mayoría de los visitantes (un 36%) conoció la campaña 'por el boca a boca'. Esto invita a pensar que en los próximos años 'podría aumentar mucho más el número, sobre todo de visitantes extranjeros'.

Entre las 3.000 encuestas que cumplimentaron los visitantes, destacó un comentario crítico realizado por un buen número de ellos, que creía conveniente pagar una entrada. La Fundación Santa María, que está diseñando ya la segunda campaña, tiene en cuenta esta posibilidad y podría comenzar a cobrar 'una cantidad simbólica', avanzó Arroita, cuyo importe equivaldría al detalle (un bolígrafo, un tríptico y una insignia) que se entrega a cada visitante como recuerdo. No obstante, la fundación también creará un Círculo de Fundadores, de modo que todas las personas que se inscriban en él podrán entrar gratis al templo.

Futuras visitas

La próxima campaña comenzará en Semana Santa (en principio se había previsto en junio) y terminará en octubre y ya hay una serie de novedades diseñadas para las futuras visitas. Se establecerá un nuevo itinerario, que incluirá una parte del edificio que no podía verse antes. Se trata del paso de ronda, esto es, un muro de la actual Catedral que en la Edad Media servía como muralla para vigilar y proteger la ciudad.

También podrá observarse el pórtico, una de las partes de mayor valor escultórico, cuya restauración comenzará este año. Seguirá libre el acceso al templo desde la calle Cuchillería, una solución que ha recibido un premio internacional de arquitectura.

Las visitas seguirán con la particularidad de que se irán compaginando con las obras de restauración, que continuarán hasta el año 2009, según el calendario establecido por el Plan Director. Este documento, la base de todo el proyecto y en el cual se lleva trabajando más de tres años, se publicará en verano en Vitoria, Madrid y Roma.

Las obras se han cuantificado en unos 4.300 millones de pesetas. En la financiación contribuyen el Ministerio de Fomento (1.400 millones), la Diputación de Álava (1.300), el Ayuntamiento (1.000), el Gobierno vasco (300) y el Obispado (300), además de otras entidades, como la Caja Vital. Todas estas instituciones están presentes en la fundación. De momento, las obras han conseguido 'detener el proceso que afectaba a esta Catedral, enferma y deprimida', comentó el diputado alavés de Obras Públicas, Antonio Aguilar, presidente de la fundación.

La restauración no sólo tiene implicaciones turísticas y arquitectónicas, sino también urbanísticas, puesto que se pretende conseguir una regeneración del Casco Viejo vitoriano. Hay cinco universidades (San Juan de Puerto Rico, Barcelona, Miami, Sevilla y Pamplona) que están realizando trabajos académicos para buscar un mejor ordenamiento del entorno de la Catedral. Por ahora, ya se ha conseguido separar el edificio de una serie de viviendas adheridas a su parte trasera. En una compleja operación, el Gobierno vasco y el Ayuntamiento han trasladado a parte de los vecinos a otra casa rehabilitada (el proceso está por culminar del todo), de modo que la Catedral ha quedado totalmente aislada.