El reformatorio El Pinar estará custodiado por la Guardia Civil

Pilar Martínez, consejera de Servicios Sociales, y Esperanza García, directora general del Instituto del Menor y la Familia, enseñaron ayer al defensor del Menor, Javier Urra, las instalaciones del nuevo reformatorio El Pinar, en el que se encuentran internos nueve jóvenes excarcelados en aplicación de la Ley Penal del Menor, que entró en vigor el pasado día 13. Urra fue informado de que el centro contará en breve con vigilancia de la Guardia Civil, que contará con una garita en el exterior de las instalaciones. 'Las medidas de seguridad del centro son suficientes y me parece acertada la idea de contar con refuerzos en el exterior porque está comprobado que a veces supone más peligro, para estas instalaciones, lo que puede llegar desde fuera', dice Urra.

Ninguno de los otros tres reformatorios madrileños, El Renasco, El Madroño y Altamira (semiabierto), con un total de 47 plazas, está custodiado por efectivos de las fuerzas de seguridad. En todos ellos hay vigilantes privados, que avisan al Cuerpo Nacional de Policía si ocurre algún incidente grave. De los cuatro centros, El Pinar será el que se especializará en los menores autores de delitos de mayor edad.

El Defensor del Menor considera el centro como 'adecuado'. 'Hay todavía algunas cosas que mejorar, pero, en líneas generales, creo que la ubicación es correcta', explicó. Urra comprobó en su visita que hay señales de la precipitación con que se han desarrollado las obras. 'Hay mucha humedad, pero nada más. La seguridad interior es también mucha. He contado hasta cuatro puertas en el interior. Tan sólo está ocupada una de las cuatro alas que tiene el edificio. Pero lo más importante es que los chavales están contentos. Les he explicado quién era y la institución que represento y me he puesto a su disposición por si tienen algún problema'.

Ayer comenzaron las obras de vallado del centro y la construcción de un acceso independiente que aísle el reformatorio del instituto San Fernando.

Obras sin permiso

Por otro lado, la Junta de Distrito de Fuencarral ha requirido a la empresa que gestiona el reformatorio El Pinar para que legalice las obras que está realizando en el centro. Un inspector visitó el pasado viernes el centro, tras la denuncia efectuada por el grupo socialista de que se estaban realizando obras sin licencia municipal.

El funcionario comprobó que la Comunidad ha hecho trabajos para la intalación de aire acondicionado sin contar con licencia para ello. 'Siempre que se comprueba la realización de obras legalizables se requiere a la empresa para que solicite la licencia. Esto es algo que está a la orden del día', explica la concejal del distrito de Fuencarral, Nieves Sáez de Adana. La edil descarta que el expediente concluya con sanciones por no haber solicitado hasta ahora la licencia.