¿Qué es lo que vende Bilbao Ría 2000?

En las pasadas fiestas navideñas recibí, al igual que el resto de mis vecinos, una revista editada por Bilbao Ría 2000, perfectamente cerrada en una envoltura, con un diseño elegante, una calidad notoria y un presupuesto, supongo, también de categoría.

También durante estas fiestas he tenido que explicar a un familiar llegado de Barcelona, a qué vienen esos monolitos de Bilbao Ría 2000 que plagan la ciudad, distorsionando en muchos casos la visión de la nueva arquitectura urbana, como el Gugenhheim o el Palacio Euskalduna. Los dichosos postes no son discretos, se reproducen por doquier, hasta dos veces en cada sitio, y, para colmo de males permanecen iluminados por la noche.

Ni lo sé, ni se lo pude explicar. Ni tampoco el dinero que tanto la revista como los monolitos nos cuestan a los contribuyentes.

Cuando ya me quedé sin palabras fue a la hora de justificar la existencia de los paneles gigantes, también firmados por Bilbao Ría 2000, imagino que igual de caros que los famosos monolitos y que hacen referencia a obras terminadas hace años, como el puente de Cantalojas.

Sinceramente no entiendo nada. Si todas las instituciones están metidas en esta Sociedad con un claro objetivo público, ¿a qué vienen estos reclamos publicitarios? ¿Quién busca protagonismo con estas solemnes tonterías? ¿Por qué no se dedican estas partidas de dinero al objetivo fundamental de Bilbao Ría 2000, que no es otro que el de mejorar nuestra ciudad, sin necesidad de tanto bombo y platillo, y de tanta majadería?-