La cocaína incautada en Vinaròs valdría en la calle 35.000 millones

La Policía Nacional ha conseguido desarticular una de las más importantes organizaciones internacionales de contrabando de cocaína que operaban en España. Esta red tenía su sede de distribución en Vinaròs, en un almacén industrial situado en la carretera nacional 340, al norte de esta población. Desde allí, repartían los cargamentos de droga que, provenientes de Colombia, desembarcaban en contenedores en el puerto de Barcelona. La mercancía llegaba camuflada en sacos de piedra pómez, hallándose en Vinaròs en el momento de la actuación policial cerca de 40 toneladas de este material, repartidos en 1.600 sacos, en los que se encontraban escondidos más de 1.000 kilos de cocaína. Esta droga se transportaba en furgoneta hasta diversos puntos de España, procediéndose en cada lugar de destino a su distribución en pequeñas dosis. La banda de traficantes poseía todo un entramado de empresas tapadera que servían para blanquear el dinero de la droga, dinero que era enviado a Colombia.

La red operaba en Vinaròs, Peñíscola, Teruel, Alicante, Madrid, Sevilla y Alhaurín de la Torre (Málaga), si bien el centro de operaciones radicaba en Vinaròs. El trabajo de investigación ha permitido detener a 22 pesonas (siete españoles, seis colombianos y nueve ecuatorianos), entre los que se encuentran los dos cabecillas: uno de ellos, conocido en la organización como 'Rafa', de origen español, fue detenido en Málaga, y el otro, 'Alfonso', de procedencia colombiana, fue arrestado en Alicante. La operación policial arrancó el pasado mes de octubre, y ha culminado este fin de semana con la actuación sobre el almacén de Vinarós y la aprehensión del cargamento de 40 toneladas de sacos que se encontraban ya listos para su distribución. El pasado viernes por la tarde, miembros de la Unidad de Intervención de la Policía Nacional irrumpieron en la nave industrial donde se confirmaron las pesquisas. Por su parte, y enclavada en esta misma operación, las autoridades colombianas ya habían intervenido el pasado mes de noviembre dos contenedores en el puerto de Barranquilla con 1.100 kilos de cocaína, oculta en sacos de resina de pino y pieles. La droga estaba preparada para su embarque con destino a España, y los destinatarios eran dos de las empresas tapadera del grupo.

La operación policial también ha permitido dar con 700 millones de pesetas en metálico ocultos en un zulo de la localidad de Nogueruela (Teruel). El zulo se encontraba en el interior de una planta baja, y este dinero era utilizado como depósito del dinero obtenido de las transacciones ilegales de la droga. El dispositivo de la operación se intensificó bastante en las últimas semanas, aumentando la vigilancia policial en el almacén de Vinaròs durante las navidades, hasta que el pasado viernes se dio la orden de actuar de manera conjunta en todas las localidades en las que operaba la red. Los efectivos de la Policía Nacional que actuaron en Vinaròs fueron movilizados desde Valencia el viernes por la mañana, y la actuación sobre los objetivos se activó a primera hora de la tarde. Además, se procedió al registro de diversos chalés y almacenes del norte de Castellón.

Las investigaciones policiales han sido coordinadas por la Unidad Central de Estupefacientes, bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional y la Fiscalía para la Prevención y Represión del Tráfico Ilegal de Drogas. Los detenidos pasarán mañana a disposición de la Audiencia Nacional.