Una directora con experiencia en prisiones

Florencia Pozuelo Rubio, una licenciada en Psicología de 41 años, cuya labor profesional se ha desarrollado en Instituciones Penitenciarias, será la directora del nuevo reformatorio El Pinar, con 40 plazas y gestionado por la asociación Cicerón.

Pozuelo dirigió la cárcel de mujeres de Valencia de 1990 a 1991. De 1991 a 1992 fue educadora en el penal de Picassent y después pasó a desempeñar diferentes cargos en la Dirección General de Instituciones Penitenciarias: directora de programas de 1992 a 1995, jefa de servicios y programas de inserción de 1995 a 1997 y jefa de servicios de seguimiento de 1997 a la actualidad.

Su equipo, que ha sido formado en un curso intensivo de seis días (48 horas), está formado por un subdirector, un criminólogo, un asistente social, un psicólogo, dos jefes de equipo, 4 monitores-tutores, 18 monitores educacionales, vigilantes y personal de mantenimiento. Todos llevarán uniforme.

La consejera de Servicios Sociales, Pilar Martínez, asegura que el centro, cuyas obras de adecuación se iniciaron el pasado día 2, está preparado para acoger desde hoy a la treintena de menores de 18 años que hasta ahora estaban en prisión preventiva en cárceles madrileñas.

En Madrid hay otros tres reformatorios, ninguno de ellos de gestión privada: El Madroño, con 15 plazas que ayer estaban llenas; Renasco, con 12 plazas, 4 de ellas libres, y Altamira (semiabierto), con 20.