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Vocación genética

Margot Molina

Pura Martínez, bioquímica metida a galerista, se propone desmitificar el arte contemporáneo en Dos Hermanas

"Para lo único que me ha servido especializarme en Bioquímica ha sido para ponerle el nombre de Doble Hélice a la galería de arte contemporáneo. Es un guiño que casi nadie entiende, pero no me importa. Se trata de la molécula de la vida por excelencia y forma parte de la cadena del ADN", explica Pura Martínez (Alcoy, Alicante-1954), propietaria de la galería de arte contemporáneo Doble Hélice que funciona en Dos Hermanas (Sevilla) desde octubre del pasado año.La nueva galerista se ha propuesto que sus vecinos le pierdan el miedo al arte contemporáneo y, tan sólo un mes después de inaugurar la sala, inició un proyecto piloto con un grupo de señoras que asistían a los cursos de la Delegación de la Mujer del Ayuntamiento de Dos Hermanas.

"Lo primero que les cuento, para desmitificar la galería, es que ésto es una tienda. Les pongo el ejemplo de una botica en la que, además de comprar, se pide consejo al boticario", comenta Pura Martínez, quien, desde finales de 1999, recibe una vez al mes a un grupo de señoras, todas mayores de 50 años, que acude a su primera cita con el arte.

"Yo no entiendo nada" o "¿Esto qué significa?" es lo primero que dicen todas, pero la habilidad de la galerista para la docencia y su paciencia convierten ese miedo a los desconocido en interés. "Fueron ellas mismas las que pidieron realizar otra visita y como las exposiciones suelen durar un mes, establecimos una cita mensual. Hay que romper con la idea de que el arte es sólo para exquisitos y millonarios", sentencia.

Su galería, en la que han expuesto ya el valenciano Antoni Miró y el cubano Juan Alberto Suárez, entre otros, quiere prestar una especial atención a los artistas latinoamericanos. Actualmente, y hasta el 16 de enero, la galería muestra el trabajo del pintor valenciano Federico Montañana y de la escultora barcelonesa Montse Gonzalo.

Licenciada en Farmacia, Pura Martínez llegó a Sevilla en 1978 y desde entonces se ha dedicado a la enseñanza de la Bioquímica dentro de los planes de Formación Profesional. El contacto con un grupo de artistas cubanos en 1996 hizo que esta alicantina emprendedora y rigurosa en sus planteamientos decidiera dar un paso que había añorado toda su vida.

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"Siempre he vivido rodeada de arte. Mis hermanos compraban bastantes obras y en mi casa siempre hubo una sensibilidad especial para apreciar lo contemporáneo", comenta Pura Martínez quien, como buena empresaria, antes de iniciar su particular aventura realizó un estudio de mercado en Dos Hermanas. En el municipio sevillano, con unos 100.000 habitantes, otros han intentado antes abrir una galería de arte contemporáneo; pero, por el momento, ningúno ha cuajado.

"Dos Hermanas son muchos pueblos en uno. Aquí ocurre algo bastante curioso y es que se ha pasado de una generación de padres analfabetos a otra de hijos universitarios sin transición. Son familias en las que faltan los referentes culturales", explica la galerista.

Pura Martínez ha partido desde cero. Compró el local, planteó el diseño junto a su marido Manuel Álvarez, y ha creado 320 metros cuadrados en tres salas comunicadas por una gran escalera de caracol que, como el nombre de la galería, también tiene la forma de una doble hélice. El espacio no tiene nada que envidiarle al de muchas galerías de Madrid o Barcelona y la marchante tiene claro que es una buena inversión. "La rentabilidad no se mide sólo en pesetas", afirma rotunda.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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