La falta de medidas de seguridad indigna a los jueces de lo Social

Los jueces de lo Social de Valencia manifestaron ayer ante el juez decano, Fernando de Rosa, sentirse indignados ante la falta de adopción de cualquier medida de seguridad por parte de la Consejería de Justicia en el edificio de Barón de Cárcer. Los magistrados aseguraron también que informarían al Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) de la falta de locales, la escasez de espacio y la ausencia de medidas de seguridad de las personas que trabajan y acuden a los juzgados de Barón de Cárcer.

Desde que a principios de septiembre pasado la inspección de Salud e Higiene cerrara cinco salas de los Juzgados de lo Social de Barón de Cárcer por deficiencias en las medidas de seguridad, la Consejería de Justicia de la Generalitat se ha mostrado incapaz de remodelar el edificio o bien de ubicar dichos juzgados en otras instalaciones más adecuadas. Una situación que ha crispado los ánimos de los 16 jueces y casi 200 funcionarios que trabajan en ellos. La Junta de Jueces de lo Social puso ayer de manifiesto ante el juez decano Fernando de Rosa su preocupación por la situación. En un escueto y contundente comunicado, la Junta expresó su "indignación" por "la falta de adopción de cualquier medida de seguridad en el edificio" así como por "la falta de previsión de medidas para el futuro". Los jueces indicaron que pedirían también a la Inspección de Trabajo que volviera a interesarse por la nueva situación por la que pasan los juzgados. De hecho, el cierre de varias salas este verano pasado ha provocado la aglomeración de personal en otras partes del edificio más próximas a posibles salidas de evacuación en caso de incendio. Además, esta vez los magistrados informarán al Consejo General del Poder Judicial del contenido de las actas de inspección que pusieron de relieve las deficiencias en materia de seguridad del edificio así como de la falta de adopción de medidas por parte de la Administración valenciana. El Consejo General del Poder Judicial conocerá también de primera mano el retraso en la celebración de juicios a causa de la falta de locales y de la escasez de espacio. Unos retrasos que según los jueces "pueden agravarse en el futuro".

El consejero de Justicia, Carlos González Cepeda, envió ayer mismo a Fernando de Rosa una carta en la que se comprometía "personalmente" a solucionar los problemas de Barón de Cárcer. Una carta, no obstante, en la que González Cepeda se reiteraba en las dificultades por parte de la Administración de encontrar una salida al problema. A pesar de que el juez decano agradeció el gesto del consejero, no tuvo reparo en afirmar que "la situación es insostenible". De Rosa expresó también su preocupación por "la seguridad de los trabajadores y ciudadanos que visitan a diario los juzgados de lo Social". Ante la pregunta de si los jueces piensan tomar algun tipo de medida de presión, el juez decano recordó que los magistrados no pueden hacer dejación de sus funciones y más cuando en los juzgados de lo Social se resuelven temas "socialmente sensibles".

"No podemos", comentó De Rosa, "dejar de dictar unas sentencias que en definitiva podrían estar retrasando el pago de pensiones por invalidez o de indemnizaciones o reincorporaciones laborales en el caso de trabajadores".

Ayer mismo por la tarde, Fernando de Rosa se entrevistó con Francisco Monterde, vocal regional del Consejo General del Poder Judicial, persona encargada en este caso de dar traslado de las quejas de la Junta de Jueces de lo Social de Valencia a dicho consejo en la reunión que éste mantendrá el próximo día 27 de diciembre.