El Barça aguarda ansioso al Madrid

Si un Barcelona-Real Madrid es siempre un duelo a muerte, el partido de hoy en el Palau (19.00, Canal +) lo será, si cabe, un poco más. Por el recinto azulgrana se respira aún cierto ánimo de revencha, ciertas ganas de vengar la puñalada que los blancos asestaron hace cinco meses, cuando, con polémica incluida, se llevaron en un quinto partido agónico el título de la Liga de baloncesto.Los protagonistas lo niegan. Dicen que todo, o casi, está olvidado. Que ésta es una nueva competición, un partido diferente, en absoluto decisivo. Sin embargo, hay detalles que contradicen tan rotundas afirmaciones. Sentencias que confirman que aquella derrota sigue pesando en el subconsciente barcelonista. "Habrá un ambiente de revancha", admitió ayer Alain Digbeu. "Pero no debemos focalizar el encuentro en eso", prosiguió el alero azulgrana. Es difícil, sin embargo, no recordar al francés tendido en la pista, llorando como un niño desconsolado, tras dejar escapar la pasada Liga.

El técnico azulgrana, no obstante, rehuye las comparaciones. Aíto García Reneses no quiere oír hablar del mal gesto de Sasha -"no es momento de revancha, no estamos a final de temporada", aseveró-; ni establecer comparaciones con el recibimiento que el Camp Nou le tributó a Figo y el que el Palau puede rendir a Djordjevic. "Aquello es un punto que hay que zanjar porque éste es un partido completamente diferente", afirmó ayer. No obstante, reconoció: "Guardo muy mal recuerdo de aquel encuentro en todos los sentidos. Es una espina que tenemos, pero es a final de temporada cuando tenemos que sacárnosla".

Lo cierto es que el Barça recibirá al conjunto de Sergio Scariolo mermado por las bajas -Rodríguez y De la Fuente son ausencias seguras; Dueñas y Ren-tzias serán duda hasta el último momento-, pero como líder tras encadenar cinco victorias consecutivas. Sólo el Pamesa ha logrado doblegar a los azulgrana en la presente temporada. Pero Aíto no se fía: "Aún tengo dudas sobre el rendimiento del equipo", confesó ayer. El técnico no ignora además que el Madrid intentará el asalto al liderato con el equipo al completo y después de contar por victorias sus cuatro últimos partidos. Ni siquiera la derrota de los blancos el miércoles ante el Olympiakos, en la Euroliga, disminuye los temores. "Seguramente vendrán aún con más ganas", advirtió Digbeu.

Se enfrentan además el mejor ataque de la Liga, el del Barça, con la mejor defensa, la del Madrid. Un duelo más que interesante.