El mercado confirma que no hay escasez de crudo

La tendencia a la baja que el precio del crudo ha experimentado en la última semana, y que se acentuó entre el lunes y ayer, responde a dos hechos clave para que el mercado confirmase que no hay -ni habrá a corto plazo- escasez de crudo y se relaje.El primero y más importantes fue que la tensión que Irak provocó con la suspensión de sus exportaciones petroleras se disipó. Se preveía que tan pronto resultara electo el nuevo presidente de EE UU, Bagdad iba a jugar todas sus cartas para sacar el mayor beneficio de la renovación del programa petróleo por alimentos de Naciones Unidas.

Irak paralizó parte de sus exportaciones durante seis días la última semana y el mercado no se volvió loco. ¿Por qué? Porque las empresas que compran crudo iraquí se adelantaron y compraron más de ese petróleo o de otro que necesitaban. No hubo pánico comprador. Ahora mismo, Irak ya ha señalado que está dispuesta a negociar con la ONU sin condiciones y los expertos ya prevén el fin del enfrentamiento. La propuesta de la ONU le permitirá a Irak quedarse con unos 600 millones de euros de sus ventas petroleras durante los próximos seis meses. Ello le permitirá reparar su industria petrolera, con lo que su producción bien podrá llegar a los tres millones de barriles diarios, frente a los 2,3 millones que produce actualmente.

La segunda, es que el Instituto del Petróleo Americano (API) informó de que los inventarios de crudo habían caído 3,7 millones durante la última semana de noviembre. Por contra, la oficial Administración de Información Energética asegura que las reservas aumentaron en dos millones. Para cuando se pongan de acuerdo, según los expertos, ya habrá llegado la Navidad. Lo más importante, según los expertos, es que el API confirmó que los inventarios de gasóleo de calefacción se han incrementado y que esa tendencia aumente puesto que noviembre ha sido un mes menos frío de lo que se esperaba.

Hay una aceptación generalizada de que el mercado no carece de crudo. Es más, la OPEP sostiene que la oferta sobrepasa en dos millones la demanda. Si se excluyen movimientos especulativos, la opinión de los expertos es que el mercado del crudo ha abandonado los exagerados precios de 33 a 35 dólares.