El comercio catalán prevé aumentar las ventas un 15% durante el puente
Primero mirar y después comprar. Esa parece ser la costumbre de muchos consumidores que aprovechan la apertura de los comercios durante el puente de la Constitución para echar un vistazo, primero, y más adelante comprar, según opinan los comerciantes. Unos 30.000 comercios de toda Cataluña abrieron sus puertas ayer con la intención de aumentar sus ventas entre el 5% y el 15%. El puente -y la celebración de la Copa Davis, que empezará mañana- llenó buena parte de los hoteles de Barcelona.
Comercio disperso
El secretario general de la Confederación de Comercio de Cataluña (CCC), Miguel Ángel Fraile, cree que el incremento de las ventas en este año será similar al del pasado, pese a la reducción en el consumo de las familias que ha empezado a notarse. "Esta desaceleración apenas se ha notado en la ropa y en el equipamiento a la persona", dice Fraile, si bien empieza a influir en productos que suponen una mayor inversión, como la automoción, el equipamiento del hogar y los grandes electrodomésticos. El presidente de la Agrupació de Botiguers i Comerciants de Catalunya (ABC), Esteve Canteria, cree que el comercio catalán puede darse por satisfecho con acabar el año con las mismas cifras de facturación que en 1999. Aunque las ventas relacionadas con las festividades de Navidad y Reyes se concentran en los días previos a estas fiestas, los consumidores aprovechan este puente para "mirar y empezar a comprar algunas cosas". Fraile opina que el mejor día será el sábado. El hecho de que la gente viaje durante este puente no afecta a las ventas, ya que "la mayoría realiza desplazamientos cortos o se queda en la segunda residencia, y es igual que compren en Barcelona o en otro lugar de Cataluña".
Cantería cree que "la gente no compra donde no ve una concentración de la oferta", y por esta razón se ha producido un "gran bajón" en lo que denomina "comercio disperso", en el sentido de no que no está ubicado en los núcleos urbanos o en ejes comerciales y peatonales. Maria Lluïsa Coll, gerente de Barnacentre, entidad que agrupa a un centenar de tiendas del centro de Barcelona, piensa que no hay que descartar la importancia que las compras de los turistas tienen en estos días, sobre todo en el centro de Barcelona. "Cada vez son más los turistas que compran en Barcelona", explica Coll, y desde hace unos años está aumentando "el turismo ruso con un alto poder adquisitivo". El hecho de que Barcelona sea principio y final de viajes de cruceros "permite que la gente permanezca en la ciudad más días y salga a hacer turismo y a comprar", añade.
Los hoteles de lujo de Barcelona creen que registrarán una ocupación del 90% a partir de mañana debido a que se celebra en Barcelona la final de la Copa Davis de tenis, mientras que la ocupación esperada para ayer y hoy está en torno al 70%. Fuentes del sector indicaron que el hotel Ritz espera una ocupación del 65%; el Hilton, en torno al 70%; el Melià, del 87%, y el Plaza -donde se aloja el equipo australiano-, del 90%.
