Un juez de Ceuta investiga la muerte de un marroquí en un calabozo

El juzgado de intrucción número cuatro de Ceuta ha abierto una investigación por la muerte de Mustafá H., un marroquí de 24 años, en los calabozos de la Guardia Civil en Ceuta el pasado miércoles. Hacia las cinco de la tarde un agente halló al detenido ahorcado con el cordón de su pantalón. Había sido arrestado el día anterior por agredir a un guardia. La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDH) exige una investigación exhaustiva de lo ocurrido y que no se archive el caso sin más como ocurrió, a su juicio, con un suceso similar ocurrido en diciembre de 1998, cuando una nigeriana embarazada se colgó también de los barrotes de la celda.Mustafá H., natural de Marrakech y residente en Marsella (Francia) fue detenido la noche del martes en el control de pasajeros de la estación marítima de Ceuta por agredir supuestamente a un guardia civil que le había requerido la documentación. Además, según la delegación del Gobierno en la ciudad autónoma, se le encontraron 20 gramos de hachís escondidos en la boca. Si no hubiese habido esa supuesta agresión, la posesión de esa pequeña cantidad de droga sólo le habría supuesto a Mustafá una multa y no hubiese pasado por el cuartelillo.

Tras prestar declaración, fue trasladado a las dependencias de la 410 Comandancia, explica la Delegación del Gobierno. Allí, según las mismas fuentes, Mustafá utilizó el cordón del pantalón para colgarse de los barrotes del habitáculo que ocupaba. Hacia las cinco de la tarde del miércoles un agente le encontró. A pesar de que un equipo sanitario del 061 intentó la reanimación, el médico certificó su defunción por asfixia diez minutos después de acudir al cuartelillo.

Éste no es el primer suicidio que ocurre en los calabozos de la Guardia Civil ceutí, ya que en diciembre de 1998 una nigeriana embarazada se ahorcó con un pijama. La APDH ha exigido de la Delegación del Gobierno "una investigación exhaustiva" e invita a la Guardia Civil y al Ministerio del Interior a "abandonar" la "práctica habitual de encubrimiento cuando suceden hechos tan graves, como es la pérdida de un una vida humana en las dependencias de los servidores del Estado encargados de custodiarla".