Fujimori se plantea presentarse a las elecciones en abril para asegurarse la inmunidad con un escaño
El ex presidente de Perú, Alberto Fujimori, confirmó ayer, vía fax a la agencia France Presse en Lima, su renuncia y no excluyó encabezar una lista al Congreso en las próximas elecciones peruanas, previstas para el 8 de abril de 2001. Para presentarse a diputado, Fujimori tenía que dimitir antes del 8 de diciembre, lo que ya ha hecho, y de salir elegido diputado se aseguraría la inmunidad ante futuras investigaciones. El presidente envió ayer cartas a sus ministros y congresistas más fieles. Según éstos, Fujimori prolongará su estancia en Japón, ya que, de volver, teme "situaciones que afecten a su vida".
El hombre que ha gobernado Perú durante una década sigue sin dar la cara a miles de kilómetros de su país; parece estar dedicado a redactar cartas que expliquen su dimisión. En las últimas horas ha enviado cartas personales a sus más allegados. Los congresistas Martha Chávez, Luz Salgado y Absalón Vázquez han sido los escogidos en el Parlamento. También recibieron misivas los ministros de Economía, Justicia y Trabajo. En el documento remitido a Luz Salgado, Fujimori se refiere al presidente del Congreso: "La elección del doctor [Valentín] Paniagua va a servir seguramente como catalizador para pasiones mezquinas y que pueden producir severas confrontaciones entre el Ejecutivo y el Legislativo. No quiero dar motivo a ello, en particular porque no me aferro al poder. Espero que con mi renuncia y un mínimo de sentido patriótico se restablezca la estabilidad política; si no, el país se estaría suicidando".
La congresista Chávez sostiene que Fujimori quiere permanecer "indefinidamente" en Japón, porque teme que su regreso a Lima derive en "situaciones que incluso afecten su propia vida". "Hasta el momento, ésa es la decisión. Él no va a regresar a Perú en los próximos días", dijo en una entrevista en la radio.
Razones graves
Chávez asegura haber conversado varias veces con Fujimori y que ella sigue pensando que "lo más conveniente sería que él regresara". Aunque, añade, entiende las razones por las que él no regresa. "Pienso que hay razones por las cuales no viene. Pienso que hay razones muy graves, que el presidente conoce, que podrían dar lugar a situaciones que signifiquen riesgo para la estabilidad democrática de Perú, y eso es lo que él menos quiere, y entiendo que puede haber situaciones que puedan afectar hasta su propia vida", dijo la congresista.Según Chávez, Fujimori "no pierde la esperanza de que la cadena de corrupción descubierta (alrededor del ex asesor de espionaje Vladimiro Montesinos, hoy fugitivo de la justicia) pueda ser atacada y puesta mucho más en evidencia". "Creo que ésa es otra de las razones por las cuales el presidente quiere tomar la tranquilidad necesaria lejos de Perú", indicó.
Por otro lado, en las declaraciones realizadas a France Presse, Fujimori reconoce tener "lazos sentimentales con Japón", porque sus padres "nacieron en este país" -concretamente, en la provincia de Kumamoto- y que por eso lo escogió para tomar la decisión de renunciar a la presidencia de Perú. Acto seguido insiste en que él y sus hijos nacieron en Perú, y añade: "La prueba de mi cariño por Perú no se ha demostrado con palabras bonitas, para la ocasión, sino con un trabajo incesante, infatigable, sin vacaciones".
Recientes investigaciones de la periodista Cecilia Valenzuela, quien en 1997 cuestionó la nacionalidad del jefe de Estado peruano, aseguran que Fujimori tiene doble nacionalidad: la peruana y la japonesa. Ello permitiría que Fujimori pueda permanecer en el archipiélago por tiempo indefinido sin necesidad de solicitar un visado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.