El Consejo Escolar prepara su primer informe sobre el sistema educativo después de seis años

El Consejo Escolar de Euskadi no ha presentado ningún informe sobre el estado de la enseñanza vasca desde hace seis años, justo desde que fue nombrado presidente Peio Ellakuria, el segundo que tiene este órgano creado en 1989. A pesar de que la ley obliga al Consejo Escolar a elaborar con carácter anual un informe pormenorizado del sistema educativo, desde 1995 no ha realizado ninguno. Ahora está elaborando el primero, que abarcará desde 1994 hasta 2000. El incumplimiento de la ley no ha supuesto ningún reproche por parte del Departamento de Educación.

La consejería, que en la actualidad dirige Inaxio Oliveri, es la que se encarga de nombrar directamente al presidente del Consejo, un órgano consultivo que da voz a todos los agentes sociales implicados en la enseñanza. María Ángeles Etxebarria, de la Escuela de Magisterio de Bilbao, dirigió el Consejo en su primera etapa, desde 1989 hasta 1994, cuando José Ramón Rekalde y Fernando Buesa (ambos del PSE) eran los consejeros de Educación. Durante este periodo, los informes de situación y otros realizados a iniciativa propia sobre aspectos concretos del sistema, como, por ejemplo, la implantación de la reforma de la enseñanza técnico-profesional o sobre la LOGSE, fueron anuales.

El parón es relevante a partir de 1995, a pesar de que en el propio guión del informe que el Consejo está preparando reconoce que el periodo 1994-2000 se caracteriza por cambios muy profundos en el sistema educativo vasco.

Según Peio Ellakuria, el hecho de que durante su mandato no se haya emitido ningún imforme anual se debe a que la reforma educativa estaba en pleno proceso de implantación, lo que aconsejó postergar el estudio hasta que ésta culminará. "Cuando hace tres años propuse realizar un informe nos encontramos con que la reforma ya estaba en marcha en las estapas de infantil y primaria, pero no en secundaria y bachillerato. En lugar de hacer algo parcial, optamos por esperar y hacer un informe glogal", se justifica. Ellakuria reconoce que es "frustrante" no haber emitido ningún informe anual y asume la responsabilidad por ello.

Sin embargo, María Ángeles Etxebarria considera que es precisamente cuando el sistema está en pleno proceso de reconversión cuando más necesario es "tender una antena" y pulsar entre los afectados (profesores y alumnos, sobre todo) cómo se viven los cambios y los nuevos peligros que acechan al sistema. "El Consejo es la voz de los agentes sociales. Si no hay informe, no pueden informar de sus preocupaciones y de las cosas que se pueden mejorar", subraya Etxebarria.

El Parlamento aprobó la ley por la que se crea el Consejo Escolar de Euskadi en octubre de 1988 y en marzo de 1989 el Gobierno sacó el decreto desarrollando todos los aspectos de este organismo. El Consejo Escolar es el órgano superior de consulta de la administración educativa y en él participan, divididos en cinco comisiones, todos los estamentos relacionados con el mundo de la enseñanza.

Así, sus informes, más que técnicos, tienen un carácter de evaluación social y buscan propiar debates. Sirven al departamento para comprobar como piensan profesores, sindicatos, padres, alumnos, directores de colegios, miembros de la universidad y personalidades de reconocido prestigio en el ámbito de la educación. Sus informes no son vinculantes, aunque el Consejo debe ser consultado preceptivamente por el departamento sobre los anteproyectos de ley y disposiciones que apruebe.

Comisiones Obreras, sindicato mayoritario entre el profesorado, cree que las últimas polémicas educativas que ha vivido Euskadi han sido una buena ocasión para que el Consejo hubiera salido de la situación de "práctico letargo" por la que atraviesa. Por su parte, la parlamentaria y ex vicepresidenta del Consejo Escolar, Isabel Celaá, considera que este órgano se ha vuelto "sumiso" con el departamento y "ha desaparecido de la escena. No tiene ninguna inquietud por estimular el debate educativo".