La demanda de energía crecerá un 57% en los próximos 20 años

La cumbre de Riad no ha dado respuestas a la actual crisis petrolera, pero al menos puede servir para prevenir la siguiente. Será necesario, puesto que el mundo no va en camino de depender menos del petróleo, sino al revés. La demanda de energía aumentará un 57% en los próximos veinte años, y el 90% de ella será de petróleo, según el último estudio de la Agencia Internacional de Energía (AIE), presentado con motivo de la cumbre de Riad. La dependencia de los países que no tienen petróleo, como España, aumentará respecto a los exportadores, especialmente los de Oriente Próximo.

Gran parte de lo que se acordó en Riad fue comenzar a preparar el terreno ante lo que se viene. Se ha insistido mucho, tanto de parte de la UE y EE UU como de los países productores, en la necesidad de invertir de forma constante en la innovación tecnológica para hallar más petróleo y para la utilización de energías alternativas. Sobre todo, para que el consumo de gas como alternativa al crudo aumente.

Fuera del foro, la UE incluso se plantea impulsar una especie de mercado del gas en paralelo con el del petróleo. A Bruselas no se le escapa que en el mercado del gas juegan muchos más actores que en el del petróleo y que ese recurso no tiene una organización de productores como la OPEP.

El secretario de Energía de EE UU, Bill Richardson, ha declarado que el mundo tendrá que invertir unos dos mil millones de dólares anuales durante los próximos 30 años si quiere asegurarse el suministro energético, ya sea de petróleo o de otro tipo de energía.

Robert Priddle, director de la AIE, no dio cifras de inversión, pero advirtió de que a pesar de los esfuerzos de los países industrializados por ampliar la utilización de energías alternativas, el petróleo seguirá siendo el mayor recurso energético para los próximos 20 años.