"He demostrado que en CDC cabe todo el mundo"

El congreso de CDC de este pasado fin de semana catapultó a Artur Mas (Barcelona, 1956) a la secretaría general del partido, y éste fue bendecido por Jordi Pujol como su delfín. A pesar de los llamamientos a la unidad, el sector moderado que Mas incluyó en la ejecutiva recibió un serio varapalo de los casi 2.000 delegados.Pregunta. Tanto Jordi Pujol como usted dijeron en sus discursos que el pueblo de Cataluña vive en un oasis y que su deseo, el proyecto de Convergència, es realizar la travesía del desierto para alcanzar el mar. Díganos, ¿qué es el mar?

Respuesta. No es el mar, sino el horizonte que se ve desde la orilla. Para mí el mar son dos cosas: la primera, el reconocimiento pleno de Cataluña como realidad nacional, y la segunda, como consecuencia de la primera, un progreso general de Cataluña en todos los aspectos, es decir, que llegue a ser un referente europeo.

P. Y para ello necesitan muchos marineros a bordo.

R. No entiendo la pregunta.

P. Sí, Pujol se refirió a que en CDC caben desde los antisistema, los socialdemócratas, los liberales, los democristianos...

R. Bueno, democristianos hay pocos...

P. Pero necesitan muchos marineros y de todos los colores.

R. Sí, en efecto. Una de las ponencias se refería al contenido ideológico y a la acción de cara al futuro. Y en la votación -la apoyó un 99,5%- se demostró este esfuerzo de síntesis. Y le aseguro que en esta ponencia convivieron los que quieren ir muy deprisa [para alcanzar el mar] y los que prefieren ir más despacio. Y todos ellos votaron a favor de la ponencia, es decir, del mismo contenido ideológico, del mismo proyecto. De lo que extraigo la conclusión de que el horizonte es el mismo para todos. Pero lo que nos interesa es que todo el país pueda llegar a contemplar este horizonte y ello nos obliga a acomodar el ritmo de la marcha.

P. ¿Está seguro de que las únicas divergencias son por cuestiones de ritmos?

R. Estoy convencido.

P. Pues durante el congreso, cuando se dio la bienvenida a la delegación del PNV, todos los delegados se pusieron en pie y los hubo que gritaron "Gora Euskadi". A algún delegado le debieron salir sarpullidos.

R. Se lo tendría que preguntar a ellos. Una manifestación de apoyo al PNV está dentro de la más pura lógica.

P. Cuando Pujol no esté en primera línea, ¿dejarán de tener crédito para llamarse nacionalistas catalanes y pactar con el PP?

R. El pacto no lo hace Pujol, sino CiU.

P. ¿Usted hizo un discurso soberanista o pragmático?

R. ¿Ustedes qué opinan?

P. Que pujolea un poco.

R. Me siento satisfecho si ésta es la lectura. Porque no es nada fácil encontrar el equilibrio en un discurso de estas características. El punto ideal, del cual no podemos movernos ni un milímetro, para mí se encuentra en la conjunción entre las diferentes sensibilidades del partido, el proyecto nacional catalán y no desentendernos de España.

P. Este equilibrio no se evidenció en el resultado de las votaciones de la lista de 10 personas que propuso para la ejecutiva.

R. No puede hablarse de un sector, sino de valoración de personas. Y entre estas personas [del sector nacionalista moderado] las hubo que obtuvieron menos del 50% y otras, más del 60%. Pero lo importante no son los resultados de unos u otros, sino que el secretario general de CDC presentó a votación una ejecutiva que recogía todas las sensibilidades del partido. Lo fundamental no es mi forma de hablar, sino mis hechos. Y por tanto quiero que las puertas de nuestro partido estén abiertas a toda la militancia.

P. ¿Por qué incluyó a personas que de antemano sabía que tendrían un voto de castigo?

R. Nadie tuvo un voto de castigo, sino que hubo unas personas con más apoyo que otras. Yo demostré, ante toda la sociedad catalana, por la vía de los hechos, que en este partido cabe todo el mundo.

P. ¿Se nace con carisma o se gana con el poder?

R. El carisma forma parte de unas condiciones relativamente innatas de una persona y se van completando y perfeccionando con el paso del tiempo y la práctica.

P. ¿Y en su caso?

R. Creo que tengo las condiciones innatas y que las iré perfeccionando con la práctica.